26 de abril de 2024 - 10:07 AM
Home Llanos Se fue mi hijo, mi parcero: Juan Grimaldos relata su pesar por la muerte de Yilmer Aguilera
LlanosNoticias de Casanare

Se fue mi hijo, mi parcero: Juan Grimaldos relata su pesar por la muerte de Yilmer Aguilera

Se fue mi hijo, mi parcero. Un relato de uno de sus amigos orocueceños

Esta es una columna que no quisiera escribir, pero es mi deber en honor a la memoria, la fidelidad, la amistad, el respeto, la solidaridad, la lucha, la tenacidad y el humanismo, algunos de tantos sinónimos que encuentro para calificar a este hombre que a la medianoche de un seis de junio deja este mundo. Fue un buen luchador social, pero esta vez el Covid indolente le quitó el último respiro. Yimer Alexander Aguilera Romero, viaja al puerto celestial a donde todos finalmente tratamos de llegar.

Lo conocí en 1994 cuando llegué a Orocué y él tenía 17 años. A ese puerto llegué a realizar actividades sociales y Yimer, Chaco, Byron y Miller fueron los jóvenes que me acompañaron en esa alegría y dinámica que le dimos a esa mi segunda patria chica. Yimer se destacó por encima de los demás líderes. Cuando salí de Orocué, en la despedida que me organizaron, le dije que siguiera el legado, y él trató de cumplirlo hasta sus últimos días: servir a la gente.

Creo que quiso parecerse a mi en muchas cosas a partir del servicio social. Se encarriló como guardían penitenciario a partir de la escuela humanista. Fue lider sindical, comunal y político. Aspiró dos veces a ser concejal y jugarretas politiqueras no lo dejaron servirle a su amado pueblo desde una curul. Denunció la corrupción. Direccionaba a campesinos, indígenas y gente del común en reclamaciones al Estado y las petroleras. Era un tinterillo andante pues entendía de los vericuetos del mundo jurídico y judicial. Amaba todos los deportes y apoyaba la cultura. Sus hijas le retribuyeron en ese campo musical, pues las dos salieron bailarinas e interpretes de la musica llanera.

Melany será médica y Sharik se fue de este mundo siendo una tierna y emprendedora niña. Yogeira, madre de las niñas fue buena compañera y hará muy bien el papel de este padre que se va. Santiago y Nicole los dos menores hijos de Yimer de su segunda relación de pareja son aun adolescentes.

Disfruté con él innumerables ratos. Permanentemente me consultaba sus asuntos laborales y personales. Caballeroso, sencillo, noble y servicial con los demás. A mi me respetó como si fuera su padre, fue mi amigo fiel, y mi parcero y confidente hasta sus ultimos días. Los tragos amargos que pasé con él fueron los siempre ligados a la muerte, pues fallecieron su madre Blanca(mi amiga), Sharick su hija, y hace poco Wilson su hermano , oficial del INPEC que también se lo llevó el virus. Era muy fuerte Yimer ante la adversidad. Solo lo vi llorar una vez. Tenía el don de no entregarse, de persistir y poco quejarse. Le temía tanto a la muerte que al enfrentarla le dio repulsa.

Estoy triste y lo estaré no sé por cuanto tiempo. Me siento golpeado desde el martes pasado que entró él como paciente Covid al hospital de Yopal de donde no salió vivo. No alcanzó a cumplir la cita con el sacerdote a donde acordamos ir, pues era católico, pero lo que él buscaría lo haré con dedicación y devoción para que encuentre la paz eterna que buscamos los cristianos. Lo que teníamos planeado era de los dos y no de uno, y eso pasa al archivo por su ausencia. A sus familiares que son los mios también, el abrazo solidario porque ese dolor está repartido por igual.

¡Nos vemos hijo, amigo y parcero! ¡Permíteme llorarlo en paz! . Dios dispondrá cuando nos toparemos los tres.

Written by
Redacción Chivas

Periodista, Director de www.laschivasdelllano.com y www.laschivasdecolombia.com

Leave a comment

Deja una respuesta