Para unos fueron cosas del destino, para otros un tema de suerte o azar, e incluso hay quienes aseguran que fue un ‘accidente’, lo cierto es que Pedro Enrique Perico Montaña, estaba en el lugar equivocado a la hora equivocada.
Al parecer, el joven de 32 años había dejado su camioneta en un parqueadero frente al Hospital y caminaba lentamente junto a su esposa, quien ayudada por unas muletas se dirigía hacia el centro médico para cumplir una cita médica que tenía cerca de las 3:00 de la tarde con el ortopedista que revisaría cómo evolucionaba la recuperación de la cirugía que le tuvieron que practicar en una de sus extremidades inferiores tras sufrir una fractura en un accidente de tránsito.
Realmente la pareja no debería estar la tarde de este jueves en la capital boyacense, sino en Europa, junto a la familia de Pedro Enrique, en unas merecidas vacaciones que habían planeado para todo el grupo, luego del fuerte trabajo que adelantan todos en una reconocida empresa de explotación y comercialización de carbón del municipio de Socha.
“Sin embargo, él y su esposa no pudieron viajar junto al resto de la familia, aunque ya tenían todo listo, porque hace 20 días sufrieron un accidente de tránsito, en el que ambos resultaron lesionados, pero en el que la peor parte la llevó ella”, dijo a Boyacá Sie7e Días una fuente cercana a la familia.
Pedro Enrique Perico Montaña y su esposa quedaron justo en medio de un atentado que iba dirigido en contra de un joven reciclador venezolano, identificado como Juan Antonio García Blanco, quien se disponía a abordar su motocicleta que había dejado parqueada cerca de una droguería ubicada en la calle 27#10A-29, justamente donde coincidencialmente, al parecer la pareja había acabado de comprar un implemento para la rodilla de ella.
“Es importante aclarar que el ataque no iba contra la persona que terminó muerta, sino que este joven era un transeúnte que quedó en la escena y desafortunadamente recibió una herida mortal”, dijo el coronel Fredy Pérez, comandante de la Policía Metropolitana de Tunja.
Según explicó el oficial, dos hombres que se movilizaban en una motocicleta dispararon contra otro que estaba en otra moto y quien se debate entre la vida y la muerte en el hospital San Rafael, pero en el ataque hirieron mortalmente a un transeúnte.
Testigos del hecho aseguran que en medio del atentado Perico Montaña, corrió a tratar de resguardarse en una cafetería contigua a la droguería, pero uno de los proyectiles lo impactó en la región toracoabdominal derecha y le causó la muerte casi que, de manera instantánea, pues de inmediato fue llevado al Hospital, pero ingresó sin signos vitales.
El cuerpo del empresario permanece desde ayer en Medicina Legal y será entregado a sus familiares quienes finalmente lograron volar de Europa a Colombia esta madrugada y estarán arribando a Tunja cerca del mediodía, para lo que serán los preparativos del funeral, que se realizaría en Sogamoso, donde la familia tiene su domicilio.
De los sicarios, lo que se sabe es que las autoridades ya los tiene plenamente identificados y al igual que el joven blanco del atentado, serían de nacionalidad venezolana, pero aún no han sido capturados.
Fuente: Boyacá 7 Días
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