25 de abril de 2024 - 4:02 AM
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Obras en vía al Llano, con acelerador

“Antes era un boleador de pala. Aquí ahora soy un varillero, como llaman a los que arreglamos varillas en la obra. Las cuadramos de un metro, de 20, como las pidan y hay que hacerlas a una medida exacta para armar bien las estructuras de los túneles”.

Hernán Rojas, de Cáqueza, explica orgullosamente su trabajo con palabras tan rápidas, como avanza la obra en la que él labora desde hace siete meses: la construcción de la doble calzada Bogotá-Villavicencio, entre El Tablón (Cáqueza) y Chirajara (Guayabetal), el segundo tramo de obras, de tres contratados para mejorar 85,6 km del corredor al Llano.

 Este segundo frente de trabajos tiene 52,5 km sumadas las nuevas vías, conectantes, retornos, accesos veredales y mejoramiento de calzadas existentes que viene haciendo la Concesionaria Vial de Los Andes (Coviandes), por adjudicación de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI).

La contratación se hizo por 1,8 billones de pesos, a precios del 2008. Coviandes hasta el pasado 15 de octubre acumulaba inversiones por 1,7 billones, solamente en obras, compra de predios y manejo ambiental.

En un recorrido por el importante proyecto de infraestructura, con un trazado paralelo al río Negro (en una parte la calzada pasa por el costado izquierdo de las aguas y en otra, por el derecho) se ve el acelerador puesto en los ocho frentes de trabajo o subsectores que tienen las obras entre los kilómetros 34 y 62 de la vía al Llano.

De acuerdo con Coviandes, el mejoramiento de la calzada existente está cumplido en un 98 por ciento; de los 46 puentes diseñados, el avance en longitud es del 71 por ciento, y la excavación con el soporte de túneles están ejecutados un 72 por ciento.

Tramo listo para junio

El avance consolidado indica que de 46 puentes proyectados están hechos 38 y en edificación otros 6; de 18 túneles propuestos se han terminado 7 y en ejecución hay otros 11. Además, avanzaron en la protección de calzadas con taludes, postura de mallas para controlar caídas de piedras en la vía y manejo de aguas.

Luis Hernando Dávila, gerente de Coninvial (firma delegada por Coviandes para esta construcción), informó que hacia junio del próximo año concluirán las obras del sector 2, donde se halla la variante de Puente Quetame.

Serán otros 6 kilómetros que se darán al servicio y se agregarán a los 12,5 km entregados el pasado junio, por el presidente Juan Manuel Santos y el vicepresidente Germán Vargas, entre la quebrada Naranjal, Quebradablanca y la entrada a Guayabetal.

En el sector 2, donde están más adelantados los trabajos, los tres túneles casi terminados –uno de ellos con salida de evacuación en caso de una emergencia– evidencian la visión, la modernización de la ingeniería y las nuevas tecnologías con las que se construye la segunda calzada de Bogotá al Llano, por donde circulan a diario más de 11.000 vehículos en promedio.

Lumiparque Banners1Algunas de estas estructuras subterráneas están recubiertas con concreto reforzado y otras, con una membrana importada de España que tiene 50 centímetros de espesor y es ignífuga: no permite la propagación de la llama, en caso de que se presente un incendio en el interior del túnel.

El cableado es subterráneo. A cada lado de los túneles que están construyéndose por debajo pasan 7 tubos, que llevan los cables de energía, comunicaciones para los llamados de emergencia (SOS) y los paneles de control, explicó Dávila.

“Entre los cables de energía –agregó– hay uno que siempre funcionará, para que se mantenga el túnel iluminado en caso de que se presente un incendio y se facilite la salida de los vehículos y de pasajeros”.

La señalización de la vía es bidireccional. Están marcándose en las dos bocas de los túneles y las dos calzadas, la antigua y la nueva.

“Con los sistemas de señalización que están montándose se podrá hacer un by pass por las dos calzadas. Si hay un trancón, un accidente o una emergencia se podrá cambiar rápidamente el sentido de la vía y los conductores podrán seguir viendo las señales que los alertan o informan”, dijo Dávila.

Además, los túneles se están construyendo con visión ambiental. Tienen dos sistemas para el drenaje: uno destinado a recoger los aceites y otros líquidos contaminantes que boten los carros, que se conducen por un canal lateral (también subterráneo) hasta unos tanques de tratamiento. Una vez tratados allí los líquidos se vierten al sistema de drenaje corriente, que pasa por la parte central bajo el túnel.

“Los tanques van a tener una capacidad para recoger por lo menos el equivalente a un carrotanque completo”, afirmó Dávila.

Túnel de dos pisos

Más adelante, en el llamado sector 2 A, entre Puente Quetame y la quebrada Naranjal, se construye el túnel más largo del tramo: de 4,3 kilómetros, por donde circularán los carros. A este conducto le construyeron otro túnel por debajo (galería inferior) que será para usarlo exclusivamente para el tránsito de vehículos de emergencia y evacuación de personas.

En este túnel trabaja el varillero Rojas, en su turno de ocho horas. Pero hay otros puntos que tienen obras las 24 horas, donde se están haciendo los túneles y sus recubrimientos de concreto.

Con Rojas, otros centenares de personas –la gran mayoría hombres (91 por ciento)– han sido contratados para que muevan retroexcavadoras, manejen grúas, construyan puentes, levanten pilotes, bombeen concreto, excaven túneles, pongan tuberías, conecten cables, carguen volquetas con materiales y controlen el tránsito en la vía, mientras siguen la obras.

“Lo importante es que hagamos las cosas como se debe”, dijo Rojas. Yo sí quiero que el día de mañana, cuando pasemos por la vía terminada, pueda decir con orgullo que estuve trabajando aquí y que hicimos la obra bien hecha”.

La nueva calzada de Chirajara a Villavo, en fase de preconstrucción

En la vía de Bogotá al Llano, el tercer tramo de obras va de Chirajara a Fundadores, en Villavicencio. La Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) adjudicó el proyecto a la Corporación Financiera Corficolombiana, bajo el esquema de asociación público privada (APP), de iniciativa privada. La contratación contempla la administración, operación y mantenimiento de 85,6 km de la autopista Bogotá- Villavo, la construcción de una nueva calzada de 24,6 km de Chirajara a la capital del Meta, 7 túneles, 20 puentes viales y 5 peatonales, entre otros trabajos. De acuerdo con la Vicepresidencia, este tramo se halla en fase de preconstrucción e inicio de trámites para la licencia ambiental y la compra de predios.

EL TIEMPO

Written by
Redacción Chivas

Periodista, Director de www.laschivasdelllano.com y www.laschivasdecolombia.com