La Jurisdicción Especial para la Paz inició un nuevo macrocaso con el que podría abrirle la entrada a paramilitares del tamaño de Salvatore Mancuso y Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel.
Se trata de un expediente que investigará los crímenes de la Fuerza Pública en asocio con grupos paramilitares y terceros civiles. Esa nueva ventana le daría un propósito a dichos exjefes paramilitares que, una vez intentaron acogerse a la JEP, fueron rechazados por no entrar en ninguno de los 7 macrocasos con los que ya contaba la Jurisdicción.
De ser así, la Sala de Apelación podría fallar a favor de Mancuso para que revele todo lo que, según él, sabe sobre el conflicto armado y el papel de la Fuerza Pública en todo ello.
¿Espaldarazo a Uribe?
La nueva línea de investigación podría ser una seña positiva al expresidente Álvaro Uribe Vélez y su partido Centro Democrático, pues ellos han insistido en la necesidad de crear una Sala especial que juzgue a los militares con criterios diferentes de los que cobijan a los miembros de la extinta guerrilla de las Farc.
Pese a eso, el “contentillo” es a medias, pues no es lo mismo abrir un macrocaso que una Sala, con todos los esfuerzos logísticos y jurídicos que ello implica.
Por ahora, la Jurisdicción estima que hay por lo menos 15.710 víctimas de hechos atribuidos a miembros de la Fuerza Pública asociados con grupos paramilitares.
JEP le respondió a Cabal
La apertura del nuevo caso también sirvió para que la JEP se defendiera de las afirmaciones de Maria Fernanda Cabal en las que aseguraba que la cifra de 6.402 falsos positivos revelada por esa entidad “era un invento” para desfavorecer a la Fuerza Pública.
“Esas 6.402 víctimas tienen un nombre, un apellido y una cédula en los autos de la Jurisdicción(…) Las pruebas están allí”, dijo la magistrada Catalina Díaz.
Según ella, en regiones como Casanare la JEP ha encontrado que más del 80 % de los resultados operacionales eran falsos y se daban a costa de ejecuciones extrajudiciales.
Sobre esto último, y respondiéndole a Cabal, la magistrada Díaz también aseguró que la JEP “no da abasto para recibir las confesiones de soldados, tenientes, cabos y coroneles que quieren reconocer los crímenes de asesinato y desapariciones forzadas cometidos para hacer presentadas como falsos positivos”.
Fuente: El Colombiano
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