A pesar de que la Procuraduría ordenó suspender la el proceso, la entidad hizo caso omiso.
La Procuraduría había ordenado la suspensión de una licitación que estaba adelantando la empresa Ceiba para adjudicar un contrato por un valor de 3.800 millones de pesos, esto porque al parecer el ente de control encontraría algunas irregularidades en el proceso como por ejemplo el plazo para la presentación de ofertas a la contratación. Sin embargo, Clarena López Anaya gerente de la entidad continúo con el proceso sin importar la solicitud de la Procuraduría.
La gerente de Ceiba no tuvo en cuenta la solicitud de la Procuraduría y mucho menos la del nuevo alcalde de Yopal, Leonardo Puentes y reactivó el cronograma para la presentación de las ofertas para luego adjudicar el millonario contrato en los primeros días de diciembre.
El argumento que presenta la funcionaria para desobedecer la solicitud del órgano de control, es que el proceso es de vital importancia para garantizar el servicio del alumbrado público en Yopal, pero esta decisión podría carrearle duras sanciones por la omisión de medidas por parte de órganos de control.
