Ya comenzaron a identificarse las zonas para que sean protegidas.
La Alcaldía de Nunchía y el Concejo Municipal trabajan conjuntamente con profesionales de la Fundación Catarubén recorriendo y reconociendo por las diferentes veredas, puntos de interés geológico, donde existen ecosistemas especiales y con gran riqueza hídrica a fin de que sean conservados y excluidos de la minería.
En respuesta al requerimiento del Decreto 2691 de 2014, con el que el Ministerio de Minas solicitó a los municipios determinar y justificar áreas que no puedan ser utilizadas para la minería, Nunchía ya tiene varios puntos identificados.
Jairo Munévar, biólogo consultor, señala que se cumplió la primera fase, en la que se recopiló información con la ayuda de la comunidad, dueños de predios y empresas que han desarrollado proyectos en el municipio.
De igual forma, las áreas que se han adquirido por parte del municipio y el departamento para conservación ambiental, también serán incluidas en el proyecto.
Con visitas de campo, se ha logrado obtener amplio conocimiento de la riqueza natural que posee Nunchía. “Hemos tenido en cuenta áreas sensibles. En éstas se incluyen nacederos de agua como manantiales, esteros, madre viejas, entre otros. En general, zonas que den oferta de biodiversidad ecosistémica, donde se alberguen ciertas especies. Adicionalmente, estudiamos si éstas cuentan con alguna categoría de amenaza, ya sea a nivel nacional o internacional que requieran una medida de protección”, afirmó el experto.
Las veredas en donde hasta el momento ya hay áreas georeferenciadas para proteger son: Tamuria, Alto Tamuria, La Capilla, Vijagual, Piedecuesta, Magüito, Betania, La Virgen, Moralito, Macuco, Romero y Tablón de Tacare.
La información de las zonas a conservar se radicará en un documento ante el Minminas mediante Acuerdo Municipal, dentro del plazo establecido, para que sea estudiado, y según la respuesta, se inicie el proceso correspondiente.
Fotos: Alcaldía de Nunchía