En verano se presentaron 77 incendios de cobertura vegetal, en los que se consumieron 5.583 hectáreas de 11 municipios.
Se adelantó la temporada de invierno en la región llanera, dejando a su paso un verano menos intenso que logró en comparación al año anterior, una reducción de hasta un 50% en los incendios forestales, reporta Gestión del Riesgo en Casanare.
El periodo de sequía que acostumbraba a sentirse desde diciembre se da por terminado a finales de marzo. Se avecinan las constantes lluvias, especialmente en el sur del Piedemonte y en el occidente de los departamentos del Meta y Casanare, en cambio el norte de Casanare, Arauca y Vichada presentarán precipitaciones a menor escala, según informó Leonardo Barón coordinador departamental de Gestión del Riesgo, refiriéndose al último boletín de predicción climática y alertas emitido por el IDEAM.
verano menos seco
Fueron identificados en la temporada de sequía unos 77 incendios de cobertura vegetal, en los que se consumieron 5.583 hectáreas de 11 municipios. Cifras que esta oficina presenta como un balance alentador sobre lo evidenciado en esta época de verano comparada con la del año anterior. Agregando que las lluvias esporádicas que se presentaron y la campaña preventiva adelantada con el sector campesino contribuyeron a la mitigación en el impacto ambiental.
Asimismo, las alertas atendidas en la cárcel de la Guafilla durante 15 días por parte del gobierno departamental, permitió el suministro de 184 mil galones de agua potable, a través de carrotanques. Igualmente, la población del sector rural se benefició con 50 mil galones.
Los desabastecimientos de agua se presentaron por reducción de la oferta hídrica en el área rural de los municipios de Nunchía y Hato Corozal, en este último las veredas: Las Monas, Maraure, La Capilla, Las Mercedes, Las Camelias y Santa Rita. Mientras que en Nunchía comunidades de: Conchal, Cañas, Santa Cruz, Tablón de Tacare, caserío El Tigre, Redención y Palmira.