Cuando se percataron del error, iniciaron un tratamiento para desintoxicar a la bebé, pero ordenaron remitirla a la Clínica San Luis en Bucaramanga, pues en Cúcuta no contaban con el equipo y personal adecuado para atender este caso.

Al llegar a Bucaramanga, los médicos se dieron cuenta que esta sobredosis afectó el uréter del riñón izquierdo y el hígado, por lo que tuvieron que trasladar a la pequeña a la unidad de cuidados intensivos.

Según Astrid Cano, abuela de la bebé, “el personal médico de la clínica debe responder por el mal procedimiento” pues fue un error humano y ahora por una sobredosis la pequeña se encuentra luchando por su vida.

Ante la denuncia de los familiares, Cristian Ordoñez, director de la clínica San Luis, informó que en ningún momento se actuó con intención y que fue un error por parte del personal, pues de manera accidental se procedió a suministrar la dosis elevada de este medicamento pero que harán todo lo necesario para preservar la vida de la menor.

Hasta ahora se desconoce el estado de la menor, pero sus familiares exigen a las autoridades abrir una investigación en contra del personal del hospital en Cúcuta por poner en peligro la vida de la bebé.