Este documental lo realizó Bladimir Sánchez periodista y defensor de Derechos Humanos
Pacific Rubliales Energy socio oficial de la selección Colombia, paga publirreportajes, ha invertido más de 15 millones de dólares en publicidad, con acciones en el diario el Tiempo y Cable Noticias, e incluso intento comprar Caracol; el periodista Héctor Rodríguez Director de la revista Primera Página, ha sido demandado en cinco ocasiones por esta petrolera canadiense, por revelar varios escándalos financieros que involucraban a sus directivos o filiales, por cada demanda exigían 5 millones de dólares como indemnización, otro caso relevante, es el del periodista Daniel Pardo columnista del periódico Kienyke, quien fue despedido por escribir un artículo de opinión luego de criticar la manera como estaba incidiendo la pauta de Pacific Rubiales. (Para ampliar la información léase: http://lasillavacia.com/elblogueo/cco…)
En la realización de este documental fuimos perseguidos y fotografiados por la seguridad física de Pacific Rubiales Energy, a un abogado del equipo de investigación, le fueron hurtados de su apartamento los equipos de comunicación, situación que me obligo a cambiar de vivienda en repetidas ocasiones.
Tienen todos los medios captados: razón por la cual nace este documental brindando otra perspectiva contada desde las mismas comunidades afectadas, en conjunto con ex empleados de Pacific, periodistas e investigadores, académicos, sindicalista, y defensores de derechos humanos; el documental busca que quienes lo observen, se permitan repensar el concepto de soberanía y territorio en Colombia, pues, en este país se favorece a la transnacional Pacific Rubiales Energy y por consiguiente se pone en detrimento a las comunidades, el medio ambiente, los trabajadores e inclusive a Ecopetrol.
Busca abrir el debate sobre la profundidad de hacer periodismo en Colombia, y como los medios de comunicación legitiman la presencia de multinacionales mineras en el país ¿será esta situación la que desactiva las denuncias laborales y fiscales?
Desde la llegada de las compañías petroleras en el Municipio de Puerto Gaitán (Meta) hay un gran número de asesinatos y desapariciones, la gente teme hablar, las campañas políticas son muy agresivas, cuentan con presupuesto de más de 5 mil millones de pesos para conseguir la alcaldía y es evidente la sumisión de las autoridades civiles y militares a Pacific, presentando así toda una maraña de corrupción.
La Red de Hermandad y Solidaridad junto a otras organizaciones de derechos humanos denuncia: “las Amenazas de muerte a dirigente comunitario, su familia y al sindicato, hackean sitios de información, roban computadores y registros de las audiencias de Puerto Gaitán, como es el caso del: Juicio Ético y Político contra el despojo acaecido el sábado 20 de julio de 2013, en el que fue atacada la Casa de la Red de Hermandad y Solidaridad con Colombia (REDHER) en Bogotá, desconocidos entraron al lugar y se llevaron computadores, grabadoras y cámaras fotográficas de la entidad organizadora de la audiencia hacia el Juicio Ético y Político a la Pacific Rubiales, y de la delegación canadiense -país de origen de la multinacional- que acompañó las denuncias de la Unión Sindical Obrera USO y las organizaciones sociales de Colombia.” (Más información en: http://juicioe.redcolombia.org/)
En el Documental Operación Pacific Rubuales, las comunidades cuentan como son perseguidos, amenazados y despojados de sus tierras y territorios. Pacific Rubiales Energy tiene a su disposición una gran infraestructura de seguridad, se puede observar que aparte de su gran seguridad privada tiene su propio batallón militar con más de 100 hombres del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) listos a seguir sus órdenes, ante este panorama las comunidades se preguntan ¿por qué en campo Rubiales se siente tan fuerte la presencia paramilitar?
Estamos en plena negociación de la Paz, la pregunta para formular seria la siguiente: Pacific Rubiales Energy con la ayuda de la fuerza pública persiguen a los sindicalistas de la USO y los trata como terroristas, ¿ésta situación ha contribuido directamente en la escalada del conflicto social y armado que vive Colombia?
Por: Bladimir Sánchez Espitia
Periodista Audiovisual y Defensor de Derechos Humanos
Twitter @xBladimir