Luego de que la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, planteara la posibilidad de una reforma laboral estructural en el país, analistas indican que se deben realizar diferentes modificaciones y trámites para hacerlo realidad.
Cabe recordar que la jefe de cartera expresó que se busca el desarrollo de un Estatuto del Trabajo que permita salarios mínimos decentes a empleados.
Otro punto clave que la ministra recalcó fue el de las brechas salariales de género, en el que se ha alcanzado un registro del 14 % y una informalidad del 27 %.
A su vez, Ramírez sostuvo que durante los próximos días se trabajará para la creación de un nuevo marco que permita modificar la jornada laboral que iría de 6 de la mañana a 6 de la tarde, en el que se pagarán horas extras después de las 6 de la tarde, y no después de 10 de la noche.
En línea con este objetivo, el senador del Partido Liberal, Juan Diego Echavarria, radicó un proyecto de Ley que restablece y garantiza los pagos de recargos nocturnos, dominicales y festivos a los trabajadores.
“Lo que buscamos es que se modifique la Ley 189 de 2022, en el que nuevamente se tenga en consideración que las horas extras se paguen después de las 6 de la tarde”, explicó el senador.
Sobre este planteamiento, Iván Jaramillo Jassir, director del Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario, resaltó que se ajustaría el régimen de trabajo ordinario y nocturno previsto en la Ley 789 de 2002 y modificado por la Ley 1846 de 2017.
“Esto se debe hacer con el objetivo de vincular las leyes naturales a la regulación laboral que reconozca las 6:00 de la tarde como el inicio de la jornada nocturna de la que emana el reconocimiento de recargos nocturnos y horas extra nocturnas, dadas las complejidades del desarrollo de actividades nocturnas”, explicó el experto a EL HERALDO.
Sobre este tema, Omar Guevara, director de egresados de la Universidad de la Salle, indicó que se debe tener presente la radicación de una reforma tributaria que puede impactar algunos sectores productivos.
“Seguramente muchas de estas empresas no querrán verse afectadas por dos caminos diferentes, sea la reforma tributaria o laboral”, detalló Guevara.
Añadió que una medida de reforma laboral puede significar mayores costos en las empresas, dado que muchos empleados en algunos casos les saldría un poco más alto los costos laborales.
Guevara explicó que el impacto en la generación de empleo “no será muy alto, y lo que debe implementar este país es una dinámica de empleo diferente, buscar estrategias que aumenten la productividad, pero preservando el bienestar de los trabajadores”.
Agregó que pese las circunstancias del presente, es viable un proyecto de reforma laboral en el país.
“Así funcionó la economía hasta el 2022. Cuando surge la propuesta de cambiar las horas extras a partir de las 10 de la noche, se hizo con la dinámica general del empleo, sin embargo, las cifras no dan cuenta de que así haya funcionado”, expresó.
El analista Iván Jaramillo afirmó que el Estatuto del Trabajo es una tarea pendiente que tiene el país desde hace más de 30 años, por lo que es necesario una actualización del código laboral.
“La Constitución ordena que se tome consideración el principio de igualdad, al igual que una remuneración mínima vital a los trabajadores, el respeto al principio de favorabilidad, de renunciabilidad, el descanso necesario, la protección de la maternidad y una serie de principios que se deben articular”, insistió Jaramillo.
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