David Ibbotson y Emiliano Sala | The Sun
David Ibbotson, de 53 años, estaba al frente de los controles de la avioneta cuando desapareció en el canal de la Mancha, al norte de la isla inglesa Guernesey.
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La revelación la hizo The Times, al revisar el registro de la Agencia Federal de Aviación de Estados Unidos y allí encontró que el piloto inglés tenía solo un certificado de pilotaje a título privado. Es decir que no le sirve para transportar pasajeros.
Según el diario británico, para acceder a esa licencia debía tener más horas de vuelo y más horas de entrenamiento en este tipo de vuelos.
Entre tanto, The Sun, agregó que solo había trabajado como ingeniero de calefacción y DJ en un bar, con lo que financió su pasión por los aviones.
Este medio inglés también reveló que días antes de desaparecer le confesó a sus amigos en una publicación de Facebook que se sentía “un poco oxidado” con los controles de la aeronave, más exactamente con el ILS – (Instrument Landing System o Instrumento del Sistema de Aterrizaje), como se ve en esta publicación:
“No estaba mal cuando llegué aquí, pero estoy un poco oxidado con los ILS. Estoy en Francia ahora, pero te veré cuando vuelva para tomarnos un café”.
Un amigo habló con ese diario e intentó defender a Ibbotson señalando que era un excelente piloto y seguro esas palabras fueron en broma.
Cabe recordar que Sala envió mensajes de audio en los que alertaba sobre sobre un viaje poco tranquilo y ruidos en la avioneta, antes de quedar atrapado en el mal tiempo cerca de Guernsey.
Estas revelaciones han llevado a las autoridades a investigar si el vuelo era legal pues, además, tenía deudas que ascendían a las 18.000 libras esterlinas (casi 80 millones de pesos).
En las últimas horas, la policía de Guernsey anunció que daba por terminada la búsqueda de Ibbotson y Sala porque las posibilidades de que estén con vida son casi nulas.
Mientras tanto, la familia de Sala y futbolistas como Falcao y Messi promueven una campaña para que las autoridades reactiven la búsqueda hasta que se tengan noticias de los desaparecidos.
Fuentes consultadas
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The Times
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The Sun
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