Así define la adrenalina y pasión por la velocidad en moto, el líder de cuarto de milla en Yopal, Diego Hernández.
Asegura que esta es una disciplina deportiva y que «no es peligro para la sociedad, debido a que practican en horario apartado en donde no se presenta tránsito vehícular».
Sin embargo, residentes de los sectores como vía Matepantano, donde realizan los piques, están cansados de esta situación que se vivía antes de pandemia y que ya comienza a reactivarse.
«No somos ñeros ni delincuentes, somos personas comunes y corrientes que nos apasiona la velocidad».
El fin de semana se conocieron unas fotos y vídeos, donde varias personas, muy pocas con tapabocas, adelantaban esta práctica, causando temor en los pobladores por dos cosas: el Covid-19 y la velocidad.
Hernández habló con Las Chivas del Llano, puso la cara, y mostró su interés en que los legalicen «pero infortunadamente no hay voluntad política de ninguna entidad ni deportiva, ni política, ni la Policía»
Dice que la gente no quiere aceptar este deporte, a pesar de que en Colombia ya hay varios circuitos de carros y motos.