La serpiente fue encontrada en el momento en que el carro se encontraba en una estación de servicio.
Con una boa de aproximadamente dos metros de largo, enroscada en el motor de su vehículo, se encontró un conductor de taxi en Bucaramanga (Santander) en el momento en que abrió el capó de su carro, de placas ZTU-700, cuando iba a provisionarlo de gas en una estación de servicio, ubicada en la avenida La Rosita.
“Yo dejé una carrera y luego me fui para la bomba. Cuando abrí el carro me llevé tremenda sorpresa, fue un susto muy grande, lo que hice de inmediato fue que solté ese capó y del susto no sabía qué hacer”, contó Jairo Mosquera, propietario del vehículo de transporte público.
En medio del asombro que le produjo la presencia del reptil, el hombre dio aviso a las autoridades, quienes a través del Grupo de Protección Ambiental de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, lograron poner a salvo a la boa y dejarla a disposición de la veterinaria Cabildo Verde.
“De donde el animal se encontraba no lo podíamos sacar, tuvimos que utilizar unas pinzas para manipular su cabeza y así evitar que atacara a alguna de las personas que se encontraban en el lugar”, explicó el intendente Fredemiro Ariza, quien participó en el operativo de rescate.
Ariza aseveró que es común que en temporada seca aumente la presencia de estos reptiles en las urbes.
Además, el uniformado añadió que la boa, que tiene un peso de aproximadamente 10 kilos, será regresada a su hábitat en el municipio de Sabana de Torres, Santander.
BUCARAMANGA