La crisis de la industria y la comercialización de las confecciones en Colombia pasó de castaño a oscuro. Todo por cuenta de la competencia desleal de los comerciantes chinos que, a las buenas o a las malas, han ido comiéndose la mayor tajada de la torta de este suculento negocio que genera 200 mil empleos directos y 600, indirectos según fuentes del sector.
Y es que una de las consecuencias más inmediatas que ha tenido la inundación propiciada por los asiáticos es que los productores nacionales para no perder mayor presencia en este mercado han tenido que bajar los precios de los productos.
Tanto que ya se cuentan por miles los pequeños y medianos empresarios que venden ha pérdida. “Nos tocó bajarle a los precios de la mercancía, antes un pantalón valía 60 mil pesos, ahora se tiene que vender a 35 o 45 mil pesos”, dijo el empresario del Centro Comercial El GranSan, Jaime Bohórquez, quien como decenas de comerciantes del lugar, de Bogotá y de Colombia, tiene una profunda preocupación por el futuro tan incierto que se cierne sobre sus empresas.
“Estamos trabajando a pérdida total”, afirma el empresario que ya ha tenido que despedir empleados, reducir la producción y, con el dolor en el alma, bajar los precios a más no poder. “Aquí, en este lugar, se ven afectadas mil personas”.,
Para Yenny Gaviria la situación no es solo más complicada sino que ve a diario el desespero de otros comerciantes que padecen la presencia de los asiáticos.
“Esperamos que el gobierno pare un poquito lo que esta pasando, que no permita que entre tanto contenedor con la mercancía de los chino, antes vendía a precio de mayorista a 20 mil pesos, ahora vendo a 17 o 16 mil pesos porque ya no me la compran a ese precio”.
Gaviria guarda la esperanza que las marchas masivas que se han hecho en todo Colombia conmuevan a las autoridades y las insten a tener mano dura con quien acaba el trabajo de cientos de miles de Colombianos.
Un panorama descorazonador al que se le suma una queja más: por defender su ‘legalidad’ los chinos han agredido a comerciantes nacionales. Varios casos ha documentado la prensa en relación con esas agresiones.
MARCHAS
La marcha convocada recientemente por un grupo de comerciantes denominada la “Gran Movilización Contra la Competencia Desleal, S.O.S por la Industria Colombiana” aunque resultó todo un éxito gracias a la masiva participación de vinculados al sector de las confecciones, del calzado y de los demás integrantes de la economía tanto del centro como del resto de Colombia que sentaron así un precedente para aún espera a que el Gobierno Nacional actúe en favor de este segmento de la sociedad tan afectado por las importaciones de productos asiáticos.
Y uno de los voceros de esa marcha fue el gerente general del Centro Comercial El GranSan, Yansen Armando Estupiñán Torres, quien dijo que “la protesta nuestra es para hacerle sentir y decirle al Gobierno Nacional que se está acabando la industria nacional, la confección y el empleo de mas de 200 mil familias que día a día confeccionan en microempresas que funcionan como fabricando prendas que se venden en San Victorino”, expresó.
Estupiñán Torres es uno de los baluartes de los comerciantes asfixiados por el comportamiento de estos extranjeros que tienen en crisis, también, a Ecuador, Brasil y España, último país en los que fueron, según las indagaciones, uno de los causantes del cierre de miles de negocios de oriundos de la península ibérica.
“Más que la mercancía, (cuestionamos) el sistema que están utilizando para ingresar la mercancía a nuestro país: no sabemos mediante qué acuerdo, o legislación están entrando la mercancía que le permite traer una mercancía que mengua la nacional; tenemos pérdidas de más del 200 por ciento”, dijo el gerente general de El GranSan.
“Hacemos un llamado al Gobierno Nacional para que establezca cómo es que están entrando estas divisas, si las están declarando, si están pagando impuestos para entrar grandes cantidades de dineros, cómo hacen para poder pagar primas de 3 mil 500 millones de pesos y arriendos al 200 por ciento de los arriendos que se pagan en el sector”, denunció el vocero.
Y prosiguió: ”(La campaña) Colombiano compra colombiano porque hay que legislar, decirle al gobierno: ‘gracias, porque nos ha apoyado en materia de legislación, con la salvaguardia del decreto 074’, pero hay que legislar en materia tributaria, de impuestos y laboral que nos permita a nosotros tener alivios para competir al mismo nivel con los asiáticos”.
“No a la ilegalidad, que el gobierno tome nota, varios países tienen el mismo problema como Ecuador, Brasil, por ejemplo, México está legislando al respecto y están acabando con al industria nacional… No podemos permitir que acaben con la industria nacional, son 200 mil empleos en San Victorino”, finalizó.
