La mujer, que reside en Barranquila, aseguró que también fue discriminada cuando intentó entrar a un almacén de Ara en el norte de la ciudad.
El caso se conoció luego de otro médico denunciara que lo hicieron desvestir para poder entrar al almacén a hacer mercado.
Ella señaló que por su caso, por el de ese joven y otros más que se han conocidos se siente “desmotivada” para ir a trabajar.
Desde que comenzó la emergencia sanitaria la enfermera vive una pesadilla y está deprimida porque a donde va la hacen sentir mal pues al verla con el uniforme la señalan como foco de contagio y envió un mensaje:
“Me siento desmotivada hasta para ir a trabajar, deprimida, a veces. Yo salí de turno y llegué al Ara que queda cerca de mi trabajo, y el vigilante me dijo que no podía ingresar porque tenía que cambiarme el uniforme; entiendan que el uniforme que usamos en la clínica no es el mismo con el que salimos a la calle”.
Entre tanto, la cadena de supermercados emitió un comunicado para disculparse con el médico que se vio obligado quitarse la ropa para entrar a sus instalaciones.
En el texto, Ara asegura que en sus políticas no está contemplada la restricción del acceso y dijo que por la tensión en la que está el país, “los seres humanos pueden equivocarse”, y agregó unas palabras para congraciarse con el personal médico:
“Esta coyuntura nos ha demostrado que contamos con héroes en los médicos y personal de la salud, y también con muchos valientes invisibles, todos los que día a día siguen saliendo de sus casas a trabajar, a atender personas, a asegurar que tengamos en nuestras casas alimentos, seguridad en nuestros barrios, transporte”.
Pulzo.