El ex ministro de Agricultura deberá pagar por una póliza de 10 mil dólares para salir de la cárcel en Estados Unidos. Testimonios como los del expresidente Uribe sumaron en la decisión del juez.
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Arias había sido detenido desde el pasado 24 de agosto en Miami, Estados Unidos. Como se sabe, contra él pesa una condena en Colombia por el escándalo de Agro Ingreso Seguro a 17 años de cárcel y el gobierno colombiano había solicitado su extradición para que cumpliera la pena en el país.
Este jueves en la Corte del Distrito Sur de Florida estuvo el expresidente y hoy senador, Álvaro Uribe Vélez, quien adeclaró a favor de Arias y argumentó las razones de por qué no puede ser extraditado a Colombia.
Horas más tarde, un juez de Miami le otorgó a Arias la libertad bajo fianza. El exfuncionario deberá pagar 100 mil dólares. Podrá regresar a su casa, pero con restricciones. La presencia de Uribe en la audiencia jugó un papel preponderante en el resultado final.
Con lo anterior, le dieron credibilidad al argumento de la defensa de que no hay un tratado de extradición vigente ni vinculante. El Fiscal del caso tiene dos semanas para demostrar lo contrario.
Es muy posible que en la noche de este mismo jueves, Arias ya esté saliendo en libertad. No podrá, sin embargo, abandonar los Estados Unidos. De hacerlo, deberá pagar, según el juez, una multa de 1 millón de dólares.
Fuentes cercanas al caso aseguran el proceso dio un giro a favor de Arias, en parte por el peso de las personas que fueron hasta Estados Unidos a abogar por la situación jurídica del ex ministro. En la justicia de los Estados Unidos aquello importa y es tenido en cuenta. No es habitual que un expresidente viaje a declarar en favor de un procesado.
La tésis del Centro Democrático y del mismo Andrés Felipe en torno a que la condena en Colombia fue más política que jurídica, tuvo cierto eco en los Estados Unidos. La columnista Mary Anastasia O’Grady escribió hace unos días en el prestigioso Wall Street Journal que Santos tenía afán de concretar la paz por miedo a Donald Trump y que la captura de Arias era un favor de Barack Obama al gobierno colombiano.
«La historia de Andrés Felipe Arias es un recordatorio desalentador de las maquinaciones políticas que a menudo pasan por justicia en Colombia. Su arresto el mes pasado en Estados Unidos es un intento por terminar el trabajo”, escribió O’Grady.
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