
Bogotá, Colombia – En un fallo que marca un hito en la justicia transicional, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) ha emitido su primera sentencia en el caso de los «falsos positivos» en el Batallón La Popa, en el departamento del Cesar. Doce exmiembros del Ejército Nacional fueron encontrados responsables de 135 asesinatos y desapariciones forzadas, presentadas falsamente como bajas en combate entre 2002 y 2005.
La decisión, que se conoce este jueves, impone a los 12 exmilitares sanciones restaurativas de entre 5 y 8 años, las cuales no implican prisión. En su lugar, deberán participar en proyectos de reparación a las víctimas, como la construcción de un mausoleo para la memoria en el Cementerio del Ecce Homo de Valledupar.
Según la JEP, los condenados aceptaron su responsabilidad y aportaron verdad sobre los crímenes cometidos, lo que les permitió acceder a este tipo de sanciones. Sin embargo, la decisión ha generado opiniones divididas. Mientras la ONU la ha calificado como un «hito histórico» en la lucha contra la impunidad, algunos voceros de las víctimas han expresado su descontento, argumentando que las sanciones no son suficientes para el daño causado.
Esta sentencia es la segunda de fondo que emite la JEP, después de la condena a los exjefes de las FARC por el caso de secuestro. Su impacto se espera que siente un precedente para otros casos de «falsos positivos» que se investigan en la jurisdicción.