El estallido social de Chile (Foto La Vanguardia)va reduciendo su violencia para dar el protagonismo a la ciudadanía en masivas marchas pacíficas, pero el Gobierno aún mantiene a varias regiones en estado de emergencia bajo mando del Ejército, que ha vuelto a decretar toques de queda para controlar la seguridad.
La medida responde a las alteraciones de orden público que han azotado Chile hace una semana por actos vandálicos, incendios y saqueos, que persisten pese a que han bajado en intensidad y que hasta la fecha se han cobrado la vida del al menos 19 personas.
Los estados de emergencia, mediante los cuales el Gobierno confía la seguridad al Ejército, y los toques de queda, que restringen las libertades constitucionales de movimiento y agrupación, no se veían en Chile desde el final de la dictadura de Pinochet (1973-1990)
El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) de Chile ha presentado hasta la fecha 67 acciones judiciales, entre ellas 5 querellas por homicidio y 12 por violencia sexual presuntamente cometidos por militares o fuerzas del orden desde que hace una semana comenzará el estallido social en Chile.
Para esta noche y la próxima madrugada, el mando militar a cargo de la seguridad allí donde rige un estado de emergencia, decretó toques de queda en las comunicas, provincias y ciudades de nueves regiones.
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