Daniel Hove, vivía en Burnsville, Estados Unidos, y fue diagnosticado con cáncer en el 2011. Según contó su hija Heather Nicoletti en el canal Kare 11, Hove fue bombero, se destacaba por su carisma y trabajó en la Fuerza Aérea de Estados Unidos.
En el 2012 se retiró por problemas del cáncer de páncreas. Los primeros días en casa estuvo con muy pocos ánimos, pero su perro logró devolverle la alegría.
Cuando Daniel entró en la fase terminal del cáncer, la mascota empezó a enfermarse, lo cual no era sorprendente ya que eran inseparables.
El pasado 14 de mayo, los hijos de Daniel tuvieron que llevar al perro al veterinario porque amaneció con las patas hinchadas, el médico les dijo que era mejor ponerle la inyección ya que no había nada qué hacer. Una hora después de que llegaron a la casa, Hove murió.
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