Les ofrecieron un lote, una casa, y un trabajo para la estabilidad de la familia Samboní, pero denuncian que aún esperan la indeminzación.
En Bogotá, en el barrio donde vivía Yuliana se le hará un homenaje y se ofrecerá una eucaristía en su nombre. En el Centro de Memoria, y otros lugares, también habrá eventos con velas blancas hacia las 5:00 de la tarde.
Adicionalmente, frente al edificio Equus 66, donde fue hallada sin vida, se presentarán un millón de firmas para pedir que se le imponga la máxima pena a su asesino, que son 60 años.
Luego del asesinato, los padres de la pequeña decidieron regresar a ese corregimiento, de donde son oriundos, y allí conmemorarán el primer aniversario de la muerte de Yuliana. En la mañana de este lunes una caravana partirá desde el parque de Los Milagros (Cauca) hasta el cementerio donde están sus restos.
- El 4 de diciembre de 2016, Yuliana tenía solo 7 años y como cualquier domingo estaba jugando frente a su casa en el barrio Bosque Calderón. Esa mañana fue secuestrada por Rafael Uribe Noguera, que la subió a su camioneta y la llevó a su apartamento donde abusó de ella y la asesinó.
Esa misma noche el vehículo fue encontrado en el parqueadero del Edificio Equus 66, en la localidad de Chapinero. En ese inmueble también se encontró el cuerpo de la niña con signos de violencia.
- En enero de 2017, Uribe Noguera aceptó cargos alegando un “momento de locura” por el consumo de alcohol y drogas la noche del asesinato. Cuatro meses después, en marzo, fue condenado a 51 años y 8 meses de prisión.
- El 7 de diciembre las investigaciones vincularon a Fernando Merchán, vigilante del edificio, y dos días más tarde apareció muerto en su casa. Era uno de los testigos claves de la Fiscalía. Meses después, el Fiscal Néstor Humberto Martínez aseguró que no había pruebas que lo relacionaran con el asesinato.
- Luego del asesinato, los hermanos de Uribe Noguera lo llevaron hasta la clínica Navarra, en el norte de Bogotá, donde fue capturado días después para responder por los delitos de feminicidio agravado, secuestro simple, acceso carnal violento y tortura.
- El 30 de diciembre la Fiscalía imputó cargos a Catalina y Francisco, los hermanos Uribe Noguera, señalados de favorecer al asesino, ocultar información relevante para el caso, destruir evidencia y alterar la escena del crimen.
- En noviembre el Tribunal Superior de Bogotá consideró la gravedad de los hechos y aumentó la pena a 58 años y una multa de 1.200 millones de pesos.
- A un año del asesinato, los hermanos Uribe Noguera están a la espera del juicio por los cargos que les imputaron. Catalina y Francisco no se han presentado a las audiencias alegando riesgos para su seguridad.
Juvencio Samboní, padre de Yuliana, ha pedido que, como Rafael, sus hermanos también sean condenados por los delitos que cometieron para favorecer al asesino y retrasar la investigación.