Una nutrida participación tuvo la marcha de protesta por las cartillas que quiere imponer a los educadores el Ministerio de Educación y las políticas que está trazando la ministra Gin Parody.
Pese a la lluvia que amenazaba con desgranarse en la ciudad, cientos de personas pertenecientes a las comunidades cristianas y católicas, y colegios privados, principalmente, marcharon por la Familia.
«Queremos el diseño original», fue el principal lema que utilizaron para pedir por la unidad familiar y exigir que «los hijos nos los dejen criar a los padres de familia».