Carlos Julio se encuentra muy afectado. Y no sabe qué hacer.
Carlos Julio Vivas, un líder cívico, conductor de un taxi, le puso la cara a la ciudad. «Perdón, perdón. No quise causarle daño al niño», dijo, al lamentar lo sucedido hace dos días cuando al arrancar su vehículo causó heridas que condujeron al deceso de un menor de año y medio, en la carrera 32 con calle 19 de Yopal.
Esta mañana hablamos con él. Un hombre sencillo, querido por el gremio de los taxistas y un gran trabajador, a quien le infortunio lo cogió el martes en la tarde, cuando arrancó el vehículo, y no se percató que el niño estaba jugando debajo del automotor.
No ha podido dormir. Tiene poco apetito. Su vida está destrozada porque, siendo un hombre correcto, causó la muerte del niño.
Por eso dio la cara y por eso sus amigos lo están respaldando. También por eso le pidió perdón a la mamá y a la ciudadanía. «No quise hacerlo. Perdónenme»
