Nace ¡En Marcha!: una nueva fuerza política en Colombia que trabajará desde las regiones

En esta oportunidad se encontraron los senadores Gustavo Moreno y Jairo Alberto Castellanos, en compañía de Juan Fernando Cristo en Barrancabermeja con el fin de llevar a cabo el lanzamiento del partido político En Marcha y mostrar la importancia de gobernar de una manera distinta desde las regiones y con la ciudadanía.

Qué busca ¡En Marcha!

Busca construir el partido desde las regiones, en donde se presente a la ciudadanía una agenda para avanzar hacia una Colombia Federal. Los integrantes del partido saben muy bien que la reforma más importante es la territorial y no se encuentra visible en la agenda nacional.

El senador Gustavo Moreno explicó que “En Marcha más que un nuevo partido político es una nueva forma de gobierno en Colombia que busca la descentralización; asimismo, es un partido digital pensado para esos nuevos jóvenes líderes que quieren gobernar por un mejor país”.

De igual manera, este es un partido digital que buscará promover la participación ciudadana efectiva y en tiempo real en la toma de las decisiones que más les convenga a las regiones. Se debe resaltar que los recursos deben ser manejados desde los municipios y departamentos y, de esa manera, no depender del Gobierno Nacional para la toma de decisiones en el territorio.

Las políticas públicas deben ser diferenciales para cada departamento y municipio colombiano, en donde se tienen necesidades, dolencias y voces diferentes, por lo cual debe haber una autonomía en la toma de decisiones y de manejo de los recursos.

Un ejemplo de esto es Barrancabermeja en donde se producen millones de barriles de combustible, pero se paga una de las gasolinas más costosas del país y que se vio perjudicado con los paros ocurridos recientemente en el cual estuvieron cerradas las vías, perjudicando así a sus habitantes.

Se tiene un Magdalena Medio, el cual es una potencia en recursos naturales, y de una gran riqueza hídrica y que necesita potencializarse desde la región y con sus habitantes que no pueden esperar que las decisiones sean tomadas desde Bogotá.