El próximo 8 de marzo, un grupo de 20 mujeres del pueblo indígena Nukak le entregará a la Comisión de la Verdad un informe sobre las violencias sexuales de las que han sido víctimas en el marco y en razón del conflicto armado interno en el departamento de Guaviare.
Este informe -que será entregado en la Casa de la Verdad de San José del Guaviare- es resultado de un proceso que inició a mediados de 2018, cuando algunas mujeres Nukak decidieron narrar públicamente sus casos de violencias sexuales.
Ese año, ellas asistieron al Tribunal Simbólico contra el Patriarcado, que tuvo lugar en Bogotá, y, acompañadas por la Confluencia de Mujeres para la Acción Pública, expusieron sus denuncias ante un grupo de congresistas Posteriormente, y en vista de que las violencias sexuales se seguían perpetrando contra ellas, decidieron sistematizar los casos y organizar sus testimonios en el informe que ahora entregan a la Comisión.
La elaboración del documento se basó en la recolección y revisión de fuentes secundarias, pero, especialmente, en un ejercicio de escucha profunda. “Este proceso de escucha se dio en espacios de diálogo con abuelas o mayoras Nukak y en entrevistas individuales con las víctimas de las violencias sexuales”, cuenta Kelly Peña, integrante de la Confluencia de Mujeres y una de las personas que acompañó la sistematización de la información.
“Trabajamos en diferentes comunidades y asentamientos. Las entrevistas fueron en idioma Nukak y en cada comunidad nos acompañó una traductora. Optamos por hacerlas de manera individual para no poner en riesgo a las mujeres que aportaron con sus testimonios”, dice Peña.
El informe da cuenta sobre casos de violencias sexuales perpetradas por actores armados legales e ilegales, pero también sobre las violencias sexuales que, sin haber sido perpetradas por dichos actores, tuvieron lugar en el marco de situaciones como el desplazamiento forzado y el despojo de tierras y territorios.
“Escuchando y sistematizando los testimonios, notamos que el control y disputa de los territorios Nukak pasa por el despojo no solo de las tierras, sino también de los cuerpos de las mujeres. La mayoría de ellas no vive en sus territorios, han sido expulsadas a la fuerza de ellos. Esa situación las ha hecho mucho más vulnerables a las violencias sexuales”, señala Kelly Peña.
Los indígenas Nukak hacen parte de los denominados “pueblos de contacto inicial”, lo que, de acuerdo con la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, los hace uno de los pueblos más vulnerables en el mundo.
“El informe que se entregará a la Comisión de la Verdad revela cómo esa situación de vulnerabilidad se agrava ante las amenazas, las violencias y las violaciones a los derechos humanos que sufren las y los Nukak en sus territorios. Particularmente, revela la situación de extrema vulnerabilidad en la que viven las mujeres de este pueblo indígena y la manera cómo otras violencias y conflictos las exponen todavía más a las violencias sexuales”, dice Peña.
La entrega del informe se llevará a cabo en el marco de un evento simbólico y ritual en la Casa de la Verdad de San José del Guaviare. Al evento asistirán 20 mujeres indígenas que compartirán sus reflexiones y relatos con el fin de que las violencias que siguen padeciendo sean visibles y no se repitan.
Fuente, Comisión de la Verdad
