El alto tribunal impugnó la decisión que había tomado el Tribunal Superior del Distrito Judicial de Manizales (que falló a favor del hombre) y le dio la razón a la víctima —identificada como María del Consuelo Morales Zamora— por lo que el dueño del perro debe pagarle a ella 48’116.176 de pesos.
La situación se presentó en Riosucio (Caldas) cuando Morales Zamora transitó por un “camino real”, según la Corte, y el perro de Sánchez le mordió una pierna provocándole graves heridas que incluso serían de por vida.
En ese sentido, la justicia determinó que el hombre infringió “los deberes de cuidado y vigilancia que le imponía su condición de garante del mismo [el perro] y en atención al principio de solidaridad que pregona un estado social de derecho, al no adoptar las medidas de precaución pertinentes”.
Al respecto, Sánchez que su perro sí era bravo porque se encargaba de cuidar la finca. No obstante, alegó en la emisora que su mascota mordió a la vecina porque ella se entró, “arbitrariamente”, a su casa, pese a que había avisos que advertían de “perros bravos”.
El perro murió por envenenamiento 15 días después de atacar a la vecina, declaró Sánchez.
El dueño dijo en la emisora que trató de conciliar con la víctima, pero ella no le “quiso aceptar nada”, razón por la que el caso pasó por tribunales hasta que llegó a la Corte Suprema.
Ahora el hombre debe pagar los más de 48 millones de pesos, aunque él señaló en el medio que no tiene los recursos para cumplir con el fallo del alto tribunal.
“Soy pobre, que me metan a la cárcel porque no tengo cómo pagar eso. Lo único que tengo es una tierrita que me dejó mi padre de herencia, que son como cuatro cuadras. Me hicieron medida cautelar cuando me hicieron la demanda. Si me quitan eso, me quedo en la calle”, aseguró el dueño de la mascota.
Fuente, Pulzo.