Gobierno y Farc anunciaron nuevo acuerdo, 40 días después del Plebiscito

POR OLGA PATRICIA RENDÓN M. Y NELSON MATTA COLORADO/  EL COLOMBIANO

Después de 40 días de las votaciones del plebiscito por la paz, hubo un nuevo acuerdo final en La Habana, rubricado por Humberto de la Calle en representación del Gobierno, y alias Iván Márquez por las Farc.

Este documento incluye modificaciones y aclaraciones sobre las propuestas entregadas al Gobierno por los partidarios del No, con el fin de superar la polarización, leyó Iván Mora, representante de Cuba en los diálogos de paz.

Según De la Calle, estos 40 días sirvieron para recibir e intercambiar opiniones con los del No, estudiar y analizar sus propuestas, y los últimos 15 días, en extensas jornadas que fueron más allá de media noche, debatir con las Farc esas propuestas.

“Ahora deseo hacer una confesión personal: dije que el Acuerdo del 26 de septiembre era el mejor Acuerdo posible, aunque era también susceptible de críticas. Y señalé que esa afirmación no se hacía desde la arrogancia. Era el mejor por cuanto permitía dar por terminado el conflicto, no para desestimar las insatisfacciones que podía generar. Hoy con humildad reconozco que este Acuerdo es mejor en cuanto resuelve muchas de esas críticas e insatisfacciones”, expresó el negociador del Gobierno.

Por su parte, Iván Márquez manifestó que la “paz sigue su marcha irrefrenable”, fundamentada en las manifestaciones sociales y el reiterado acompañamiento de la comunidad internacional que los incitaron a continuar. “Pese a la débil mayoría teníamos el compromiso político de seguir buscando un acuerdo”, agregó el segundo hombre de las Farc.

En la mañana el presidente Juan Manuel Santos llamó a los principales representantes del No a confirmarles la inminencia de un nuevo acuerdo con las Farc. La excandidata presidencial Martha Lucía Ramírez y el expresidente Andrés Pastrana aseguraron que debían revisar el nuevo acuerdo para poder opinar al respecto.

Pero con el expresidente Álvaro Uribe el mandatario se reunió personalmente en Rionegro, Antioquia, y aunque la reunión, que duró más de tres horas fue privada, el senador aseguró en una declaración pública que le solicitó al mandatario no darle un carácter de definitivo al acuerdo sino más bien esperar nuevas observaciones de los defensores del No y de las víctimas. “He insistido al Presidente de la República en la necesidad de un Acuerdo Nacional sobre la paz, que incluya a las instituciones de justicia”, agregó.

Sin embargo, el acuerdo presentado ayer es definitivo, y fue anunciado como el nuevo acuerdo final y firmado por las partes.

El senador Iván Cepeda, miembro del grupo de facilitadores para los diálogos de paz, expresó que “aquí no hubo ninguna clase de ejercicio superficial o cosmético, sino una labor transparente, incluyente y rigurosa, que permitió llegar a un consenso”.

Después del anuncio desde La Habana, el jefe de Estado dio una alocución en la que explicó por qué era urgente llegar a un nuevo consenso.

“Era necesario llegar a un acuerdo – fortalecido con esos ajustes y cambios— que reflejara el sentir de la inmensa mayoría de nuestros compatriotas y poder construir así una paz más amplia, más profunda. Era indispensable además, lograr este acuerdo renovado muy rápido. El cese al fuego es frágil. La incertidumbre genera temores y aumenta los riesgos de echar este inmenso esfuerzo al traste”, dijo.

Y todo el trabajo realizado para dar con un nuevo acuerdo derivó en que se lograron “precisiones, ajustes y cambios en 56 de los 57 temas abordados” (ver recuadros numerados).

El resultado del plebiscito y el trabajo de estos 40 días sirvió para unir a los colombianos, lo dijo Humberto de la Calle y lo confirmó el presidente: “este acuerdo de paz con las Farc retoma y refleja las propuestas, y las ideas de todos los que participaron en este gran diálogo nacional. Responde y aclara las preocupaciones que muchos tenían frente a la letra, el sentido del acuerdo o su implementación”.

Por eso mismo, Santos invitó al pueblo colombiano a acompañar el nuevo acuerdo: “Esa es mi invitación. A que nos unamos, así el acuerdo no satisfaga todas las aspiraciones de todos los sectores. Invito a todos los colombianos, a los promotores del Sí y del No, a que le demos una oportunidad a la paz con este nuevo acuerdo”.

Los delegados del Gobierno regresarán a Colombia a hacer pedagogía sobre el nuevo documento, con la meta puesta en que las mayorías lo acepten y a la espera de la refrendación.

1. JURISDICCIÓN ESPECIAL PARA LA PAZ

Este fue el punto que más cambios tuvo, sin perder la esencia. Según el senador Iván Cepeda, del Polo Democrático, se incorporaron 50 modificaciones, aunque dejó claro que el texto conserva su esencia, en lo referente a los derechos de los ciudadanos, y señala las transformaciones necesarias para una paz estable y duradera. Iván Márquez precisó que el 65 % de las propuestas del No fueron incorporadas al nuevo acuerdo.

-No habrá magistrados extranjeros, aunque se acepta la asesoría de expertos internacionales.

-El marco normativo del Tribunal de Paz será el Código Penal Colombiano.

-Se especificaron los mecanismos de la restricción efectiva de la libertad, los periodos de las sanciones, los sitios en los que se pagarán las penas, los lugares de residencia y el monitoreo de los responsables de delitos de lesa humanidad y graves crímenes de guerra.

-Se estableció la duración de la JEP por 10 años.

-Para reparar a las víctimas las Farc entregarán un inventario de todos sus bienes durante la dejación de armas.

– Se eliminó el carácter habitual de la colaboración de terceros con los actores del conflicto armado para ingresar a la JEP.

2. PARTICIPACIÓN EN POLÍTICA

Este fue quizá el punto del acuerdo con las Farc que tuvo menos modificaciones en la nueva ronda de negociaciones; sin embargo, se realizaron aclaraciones importantes que habían exigido los voceros del No. Entre ellas:

– Se precisó que las Farc no podrán inscribir a sus futuros candidatos para las 16 curules transitorias en la Cámara de Representantes, que serán creadas para las víctimas y comunidades afectadas por el conflicto. Esto cierra una brecha tildada por los opositores de peligrosa, pues veían la posibilidad de que la insurgencia usurpara esos espacios.

– El presidente Juan Manuel Santos señaló que “se redujo desde el primer año el 30% de la financiación al partido de las Farc, para que quede en igualdad de condiciones con los demás partidos”.

– En la Comisión de Protección y Garantías para los reinsertados no habrá participación de las Farc, ni tendrán facultades para vigilar a las empresas de seguridad privada contratadas.

– Pese a que varios líderes opositores querían que los máximos jefes de la guerrilla no pudieran ser elegidos para cargos públicos, Santos reconoció que “aquí no se logró avanzar”. Recordó que “las Farc tienen un origen político y su intención hacia el futuro es poder hacer política sin armas” y reiteró que a pesar de todo “no tendrán curules a dedo”, como sucedió en procesos de paz de otros países, y tendrán que participar en las elecciones.

3. REFORMA RURAL Y DROGAS

Según los anuncios, se precisó en el nuevo texto que “nada debe afectar el derecho constitucional a la propiedad privada” y se aclaró que los programas para los campesinos no excluyen la agroindustria ni al turismo. Otras reformas serán:

– Ajustes de los tiempos de implementación a las “nuevas realidades fiscales”.

– El acuerdo, por sí solo, no crea Zonas de Reserva Campesina.

– Se concretó la forma en que las Farc van a cooperar contra el narcotráfico: por medio de información detallada para atribuir responsabilidades.

– En las políticas para pervenir el consumo, “se robustece el papel de la familia y de los grupos religiosos”.

4. IMPLEMENTACIÓN JURÍDICA

De La Calle afirmó que el acuerdo con las Farc ya no estará incorporado a la Constitución Política ni al bloque de constitucionalidad. Frente a ese cambio, “el principio general de garantía de cumplimiento es el compromiso de que ambas partes cumplirán de buena fe lo pactado”.

– Las tutelas en contra de decisiones de la JEP serán revisadas por la Corte Constitucional.

– Los magistrados tendrán en cuenta caso a caso la jurisprudencia de las cortes colombianas, para pronunciarse sobre la conexidad del narcotráfico con el delito político.

– Se clarifica que la normatividad de la JEP incluye el Código Penal colombiano “y que las normas procedimentales deberán ser incorporadas al ordenamiento legal”.

5. ENFOQUE DE GÉNERO

La discusión se centró en que las mujeres han sufrido especialmente el conflicto armado, por lo que necesitan medidas especiales de reparación. El Gobierno ha manifestado que el acuerdo no pone en riesgo la familia tal como está en la Constitución. La visita de delegados de las iglesias cristianas evangélicas, de la senadora Vivian Morales y de representantes de los LGBTI a La Habana y las conversaciones del presidente con pastores y sacerdotes habrían logrado llevar el enfoque de género a un punto intermedio en el que la población LGBTI obtuviera beneficios solo bajo su reconocimiento como víctimas, además se aclara sobre medidas de reparación a favor de quienes, por razón de sus creencias religiosas, hubieran sido víctimas del conflicto.