Así lo señaló Daniel Palacios, viceministro del Interior, quien anunció que se enviará a un grupo de antiexplosivos para proceder al desminado en los ríos.
Sin embargo, destacó que la principal preocupación de los habitantes se origina a partir de la tragedia que vivió la comunidad en el pasado, y que ocasiona que cada que haya algún brote de violencia, así sea pequeño, traiga a colación estos acontecimientos; “que es entendible, eso genera una sensación se zozobra y miedo”, dijo Palacios.
El funcionario aclaró que lo que sucedió el pasado mes de diciembre fue una incursión de entre 10 y 15 delincuentes, que llegaron a intimidar a la comunidad y aseguraron que tenían una presencia aún más grande en los alrededores.
Fuente, Pulzo.