Los testimonios y otros elementos de prueba aportados por la Fiscalía General de la Nación fueron determinantes para demostrar la responsabilidad de Ovidio Isaza Gómez, hijo del exjefe de las extintas autodefensas Ramón Isaza, en el desplazamiento forzado de una familia campesina en zona rural de Victoria (Caldas).
En ese sentido, el Juzgado Penal del Circuito de La Dorada (Caldas) condenó al procesado, conocido con el alias de ‘Roque’, a 105 meses de prisión (8 años y 9 meses), y le impuso multa de 875 salarios mínimos mensuales legales vigentes.
La investigación evidenció que, el 1 de abril de 2002, cerca de 70 hombres armados llegaron a la finca de la familia Herrera Tamayo, ubicada en la vía que de La Dorada conduce a Norcasia (Caldas). En medio de amenazas de muerte, el jefe de hogar fue obligado a salir de la parcela y dejar abandonados a su compañera sentimental y a su hijo de tres meses de nacido.
El hombre denunció lo ocurrido en 2010, tras completar 8 años sin ubicar a sus seres queridos.
Ante el abundante material recopilado por un fiscal de la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos, en abril de 2019, alias Roque aceptó que ordenó el desplazamiento. Reveló que pidió a sus subalternos despejar la finca en la que vivían las víctimas porque estaba en medio de un corredor utilizado por grupos de autodefensas del Magdalena Medio para mover sustancias y otros elementos ilícitos.
Para el juez de conocimiento, la intempestiva desintegración familiar ocasionada por el actuar criminal de Ovidio Isaza Gómez generó gran dolor y sufrimiento, por lo que también condenó al procesado a pagar 500 salarios mínimos mensuales legales vigentes por concepto de perjuicios morales.