Esta es apenas una muestra, de lo que le puede pasarle a un niño, al que se le volvió realidad su sueño.
Esta como tantas historias en el país y en el mundo se repiten todos los días y más evidentes son en épocas de crisis como las que estamos atravesando, pero nos es momento de llorar sobre la “leche derramada”, sino más bien aportar un granito para lograr obtener la felicidad de los demás.
¿Qué haría usted si conoce una historia como la de Santiago, que nació con su movilidad limitada a consecuencia de una artrogriposis múltiple congénita caracterizada por la limitación congénita del movimiento articular, aunque su inteligencia es normal?
¿Usted ayudaría a una persona, a la que la han sometido a 37 cirugías, para que pueda llevar una vida más cómoda como la suya o la mía?
Por muy duro que sea su corazón ¿usted escucharía esta petición? La historia de Santiago se conoció, al ser entrevistado por un canal boyacense de nuestro colega Harry Arizmendi, quien pidió un computador para él (Santiago) y sus hermanas, porque este pequeño estudiante, igual que tantos niños en Boyacá, necesitan adelantar su proceso formativo desde casa en lo que se ha llamado #AEstudiarEncasa.
Al “regar la bola” como coloquialmente se dice en Colombia, con muchas personas, la familia Rodríguez se reunió para entregarle un computador de segunda que estaba vendiendo uno de los integrantes, con la felicidad de cumplir con este acto humanitario, gustosos de hacer la entrega, evidentemente fueron a la casa de Santiago, de sus hermanas y de la abuelita que los cuida para entregarlo.
Todo iba muy bien
Golpearon, anunciaron la entrega, lo instalaron y todos felices saltaban y se abrazaban de la felicidad y de un momento para otro el computador se apagó. Todo quedó en silencio y preocupados, los donantes salieron despavoridos a conseguir un técnico con la mala fortuna que no era posible un arreglo rápido y mucho menos confiable.
A pesar de que hubo un importante anuncio, de otra familia, en la noche; desde el momento comenzó la búsqueda, con amigos y conocidos, de más recursos para comprar su computador nuevo.
La solidaridad de la gente no se hizo esperar y los recursos llegaron, a estos se unió la base económica con la que se había comprado el de segunda y ahora se había completado para el nuevo equipo.
¿Cómo describir un milagro?
Nuevamente llegó un grupo de los donantes al hogar de Santiago, de los mismos que habían emprendido esta tarea de entregarle su equipo de cómputo, lo sacaron de su caja, se lo instalaron, y Santiago desde la primera visita con el solo hecho de estrenar un pad mouse y tocar su propio mouse comenzó a mover uno de sus dedos. Milagro, milagro gritaba su abuela y los aterrados visitantes preguntaron: ¿Por qué?
Ella comentó que ese dedo no lo movía antes y que su nuevo regalo había impedido que se le hiciera una más de tantas cirugías a la que, seguramente, tocaría realizar para mejorar su movilidad.
Santiago, como tantos niños estudiantes de Colombia, anhela mejores condiciones para continuar con su proceso formativo en un país que se esfuerza por decirle a las comunidades educativas que la Educación es el Camino y que con la ayuda de todos es fácil que sigan esta senda.
Precisamente, este es un claro ejemplo de lo que manos generosas y un corazón abierto y dispuesto a ayudar puede generar, en un niño reacciones, que son imposibles de describir.
Cómo ayudar
En Boyacá, la Gobernación y su Secretaría de Educación emprendieron la Campaña Solidaria #TuColegioTeLlama donde todas las personas de Colombia y el mundo se pueden vincular aportando tecnología, lapices, cuadernos, y cualquier material para los estudiantes más necesitados del departamento. Puede hacer clic en este enlace para conocer más sobre esta iniciativa. http://sedboyaca.gov.co/tucolegiotellama/
Sé que no se habían olvidado otra parte de la historia, que les había contado. Pues resulta que en la noche, después de conocer que el computador de segunda estaba en duda su arreglo y su continuidad del servicio recibimos un mensaje que una familia de Estados Unidos en Tampa Florida, que donaba un computador nuevo.
Este nuevo aparato se destinará para otra familia compuesta por 7 integrantes, 5 niñas padre y madre, que viven en una pieza hacinados, y que necesitan de una ayuda similar, en uno de los 123 municipios del departamento. Hasta Cucaita, la tierra donde nació Rafael Antonio Niño, gloria del ciclismo colombiano y boyacense, llegará esta nueva ayuda y les contaré si hubo otro milagro. Gracias a todos de corazón.