Cuando se escucha la voz de Mario Velásquez Sierra al otro lado del teléfono, uno de inmediato se imagina a un abuelo sentado en un sofá echando cuento. Después, cuando lo tiene al frente, comprueba que su voz no engaña. Y que sí, que es un abuelo con muchas historias, las mismas que él disfruta contar.
Tiene 85 años y no ha perdido la capacidad de asombro. Don Mario es muy curioso, también muy creativo: desde hace diez años colecciona palabras paisas. Cuando viajaba a los pueblos por su trabajo como vicepresidente en una importante compañía de seguros, las escuchaba y las guardaba en libretas, luego las digitalizó en su computador, entonces el resultado de todo fue una especie de diccionario que ya tiene 1.310 palabras.
Motivado por los consejos de su nieta Manuela Hernández Velásquez, el año pasado, en pleno encierro por la pandemia, sacó la primera edición de Vocabulario Paisa. Fueron 300 ejemplares de una publicación de bolsillo que le regaló principalmente a familias y amigos. Este libro va en su segunda edición: sacó 600 ejemplares.
—Mi nieta Manuela los vende a través de esas redes Instagram, Facebook y no sé qué más cosas. Yo le decía que me daba susto que nos encartáramos con tantos libros y ella me decía tranquilo papito que los vendemos; y así fue, ahora solo tenemos diez libritos—, cuenta don Mario, y luego suelta una risa franca, contagiosa.
En su biblioteca hay libros de americanismos, de Tomás Carrasquilla y otros escritores. Se los ha leído todos porque ahí encuentra palabras que le ayudaron a completar su singular diccionario paisa.
—¿Por qué se le despertó ese gusto por las palabras?—, le pregunto.
—Me gusta mucho el costumbrismo. Cuando visitaba los municipios me encantaba escuchar a los campesinos hablar en ese léxico tan lindo, con esas palabras tan desconocidas por algunos.
—¿Cómo describe el acento paisa? ¿A qué suena?
—Es pegajoso, agradable, es un acento que después de escucharlo mucho se le queda grabado y lo utiliza permanentemente.
Este es un diccionario muy particular: incluye palabras que comienzan con las letras CH, Ñ y LL. Al final, después del grupo de la Z, hay dichos y refranes paisas. Y más adelante, antes de cerrar el libro, dichos relacionados con el coronavirus.
A final de este año, don Mario espera publicar la tercera edición de Vocabulario Paisa, la cual incluirá otras 300 palabras. El nombre tendrá una modificación: Vocabulario Paisa y algo más.
—¿Por qué el algo más?
—Tendrá unas siete secciones más. Una con palabras de avisos de carreteras, fondas y tiendas; los gentilicios de los 125 municipios de Antioquia; las palabras que han surgido en la pandemia y que estudia la Real Academia Española (RAE); estará una idea que me dieron mis nietas, la combinación de nombres y apellidos (Armando Tapias, Armando Paredes, por ejemplo), de estas tengo unas 800.
Don Mario no tiene una fórmula para la memoria (se sabe el significado de todas estas palabras) y su mayor motivación para continuar publicando es ver cómo la gente se divierte con el trabajo que hace, con su libro que a más de uno le saca una carcajada o lo pone a pensar.
Fuente, El Colombiano
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