Con la construcción de 1.400 metros de canales y jarillones, la Gobernación de Casanare, bajo el liderazgo del gobernador César Ortiz Zorro, culminó importantes obras de mitigación del riesgo en zonas vulnerables del municipio de Monterrey, en coordinación con la Alcaldía local.
Las intervenciones se realizaron en cinco veredas: Palo Negro, Brisas del Llano, Bella Vista, Marenao y Caño Rico, sectores históricamente afectados por desbordamientos y fenómenos climáticos asociados a caños como Los Hoyos, Caño Rico, Guacarí, Guafal y Caño Grande.
Según informó el director de Gestión del Riesgo de Desastres del departamento, Guillermo Velandia, estas obras se llevaron a cabo en puntos críticos identificados por las propias comunidades, lo que permitió dar respuesta directa a solicitudes ciudadanas y reducir de forma significativa el riesgo de inundaciones.
Durante un recorrido de verificación junto a concejales y funcionarios municipales, Velandia destacó el impacto positivo de estas acciones en la seguridad de predios, vías y viviendas:
“Estamos respondiendo al llamado de la gente. Estas obras no solo protegen vidas, sino que fortalecen la prevención y la confianza en las instituciones”.
Los testimonios de los habitantes dan cuenta del alivio en las zonas intervenidas.
María Barajas, residente de la vereda Bella Vista, expresó:
“Anoche llovió y dormí tranquila, sin pensar que la quebrada nos iba a llevar”.
Por su parte, Diógenes Díaz, de Brisas del Llano, calificó la obra como fundamental para su tranquilidad:
“Esto es importante para garantizar la estabilidad de nuestras casas y la vida de nuestras familias”.
La administración departamental reiteró su compromiso con seguir ejecutando acciones de prevención del riesgo y atención a comunidades rurales expuestas a emergencias climáticas.
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