
TUNJA, BOYACÁ. Más que entregar ropa, se entregaron gestos de dignidad. Con la participación de más de 42 familias recicladoras, el Gobierno de Boyacá lideró una jornada sin precedentes: el primer ‘Ropero Solidario’ del departamento, una iniciativa que honra la labor silenciosa de quienes reciclan el presente y protegen el futuro.
El evento se realizó el pasado 26 de mayo de 2025 y reunió más de 5.000 prendas de vestir donadas por boyacenses solidarios. De estas, unas 1.800 fueron entregadas durante la jornada a través de un sistema simbólico y pedagógico con los ‘Grandes’, billetes didácticos con íconos de Boyacá, creados para exaltar el valor de los recicladores como guardianes del medio ambiente.
“Hoy no solo entregamos ropa, entregamos dignidad, salud, alegría y reconocimiento”, expresó Daniela Assis Fierro, gestora social de Boyacá.
Una jornada para el alma… y el cuerpo
El ‘Ropero Solidario’ fue más que una entrega. Gracias a la alianza entre la Gobernación de Boyacá, la Fundación Charito Go, organizaciones sociales, empresas recicladoras, el sector privado y decenas de voluntarios, se ofreció una jornada integral de cuidado y reconocimiento para esta población históricamente invisibilizada.
Las zonas habilitadas incluyeron:
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🩺 Zona de salud: toma de signos vitales, atención médica y promoción de hábitos saludables.
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🎨 Zona infantil: juegos, pintucaritas y espacios artísticos para niñas y niños.
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✂️ Peluquería solidaria: cortes de cabello gratuitos como acto de autocuidado y autoestima.
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💬 Zona de escucha y fortalecimiento familiar: orientación psicosocial y acompañamiento emocional.
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👕 Zona del ropero: un espacio simbólico de intercambio digno donde cada prenda representó un acto de respeto.
“Les agradecemos por habernos mirado con los ojos, pero sobre todo con el corazón”, expresó con emoción Adriana Bustos, representante de ReciTunja, durante el cierre del evento.
Una red tejida con respeto y voluntad
Este encuentro demostró que cuando el Gobierno, la comunidad y el sector privado trabajan articuladamente, es posible transformar realidades y tender puentes de equidad. El evento no solo visibilizó a los recicladores, sino que sentó un precedente de política pública con sentido humano.
La jornada, que inició en Tunja, se proyecta ahora hacia otros municipios de Boyacá, con el objetivo de dignificar, escuchar y empoderar a quienes hacen posible el reciclaje desde la raíz.