
Tunja, Boyacá – El Puesto de Mando Unificado (PMU) de Boyacá, liderado por el gobernador ded Boyacá, Carlos Amaya, y con la presencia de altos mandos de la Policía y el Ejército, realizó un «llamado respetuoso, pero con criterio» a los manifestantes que mantienen bloqueados siete puntos estratégicos en el departamento. La solicitud principal es garantizar la intermitencia en los bloqueos para permitir el paso, ante las crecientes afectaciones económicas y sociales.
Aunque el gobernador ha expresado solidaridad con el derecho a la manifestación y ha facilitado el diálogo con el gobierno nacional, enfatizó que «no pueden seguir afectando los derechos de otros ciudadanos».
Impacto Devastador en la Región: Las consecuencias de los bloqueos se han traducido en pérdidas significativas y la vulneración de derechos:
• Crisis Láctea: Se registran 360.000 litros de leche represados en Boyacá, una situación calificada como «un pecado» tras la reciente recuperación del sector lechero.
• Pérdida de Alimentos: En el punto de bloqueo de Paipa, 250 camiones cargados de alimentos perecederos con destino a Bogotá están represados y la producción se está dañando, generando pérdidas para los campesinos.
• Bienestar Animal y Ganadero: 150 camiones con animales sufren las consecuencias, afectando tanto la economía de las familias ganaderas como los derechos de los animales, que permanecen encerrados sin alimento.
• Afectaciones Humanas: El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) ha reportado impactos en niños y niñas, mientras que la Defensoría del Pueblo ha informado sobre ciudadanos que han perdido citas médicas importantes programadas con antelación debido a los bloqueo.
Diálogo en Curso y Postura Gubernamental: El gobernador confirmó que se están llevando a cabo mesas de negociación con altos directivos del gobierno nacional:
- • Una mesa de diálogo sobre la minería de carbón se realizó ayer.
- • Hoy se instala otra mesa en Ventaquemada para abordar la problemática de los campesinos de la alta ladera.
- • Mañana, se instalará una mesa de negociación con los «haqueros de Occidente».
El mandatario departamental informó haber conversado con el Presidente de la República, a quien aclaró que las demandas de mineros y parameros son «causas distintas, problemáticas distintas» y no buscan la explotación de carbón en el páramo. El Presidente ha instruido a sus ministros a resolver lo que esté a su alcance.
A pesar de las críticas en medios nacionales por no intervenir de manera inmediata con la fuerza pública, el gobernador reiteró que «aquí lo primero es el diálogo». Sin embargo, advirtió que el diálogo no puede ser una excusa para «afectar los derechos de otros ciudadanos y generar este caos», subrayando que «los únicos afectados son los pobladores de Boyacá».
Se espera que las negociaciones avancen y que los voceros de las mesas logren acuerdos de intermitencia y el pronto levantamiento de los bloqueos. Las autoridades del PMU seguirán trabajando durante el día con la esperanza de dar «buenas noticias al departamento de Boyacá» a las 7 de la noche. La resolución del paro es crucial para poder celebrar el 7 de agosto y recibir la visita presidencial el 8, con miras a la firma de un pacto territorial para el desarrollo productivo, agroindustrial, turístico y la gestión del agua en Boyacá.