Berrnie Moreno, senador Estados Unidos
Washington D.C. / Bogotá – 11 de noviembre de 2025.
El senador colombo-estadounidense Bernie Moreno lanzó una de las declaraciones más fuertes pronunciadas desde Washington en contra del presidente Gustavo Petro, acusándolo de sabotear la relación bilateral entre Colombia y Estados Unidos y de “deshonrar a Colombia” con un comportamiento errático, complaciente con narcotraficantes y centrado en victimizarse en redes sociales.
En un mensaje público, Moreno afirmó que desde su reunión con Petro en agosto —cuando buscó acercar posiciones— el mandatario colombiano “ha hecho todo lo posible para imposibilitar” una relación de beneficio mutuo. “Jamás habría imaginado semejante desastre”, expresó.
Moreno fue aún más allá: “Bolívar representaba fuerza, valentía e integridad. Petro deshonra ese legado”. Según él, Colombia carece hoy de un líder capaz de mantener un rumbo coherente y serio frente a Estados Unidos.

Los ataques de Petro y la respuesta de Washington
Las palabras del senador llegan justo después de una serie de pronunciamientos del presidente Petro en los que acusa a Washington y a la familia Moreno de conspirar contra su gobierno. Moreno sostiene que, pese a las provocaciones, Estados Unidos está preparado para recomponer la relación “el próximo año”, cuando —según él— los colombianos elegirán “un camino diferente”.
El senador aseguró que, históricamente, ambos países han trabajado juntos durante 200 años y que los mejores días para Colombia “están por venir”, siempre que haya un liderazgo que permita reconstruir la confianza.
Implicaciones en la relación bilateral
Los señalamientos se suman a una tensión creciente entre ambos gobiernos, que se ha intensificado desde la filtración de un documento que supuestamente plantea una línea dura de sanciones contra Petro y su círculo más cercano. Aunque la Casa Blanca no ha confirmado el contenido del dossier, la polémica ha elevado la confrontación política y aumentó la incertidumbre diplomática.
Lo que viene
Moreno insiste en que Estados Unidos está listo para “ayudar al pueblo colombiano a alcanzar su sueño de un país libre de violencia y corrupción”. Mientras tanto, el gobierno de Petro sostiene que está enfrentando un intento de presión política desde Washington.
La tensión sube, la diplomacia tambalea… y el pulso político apenas comienza.
