José Rodrigo Plazas Moreno, movió al Gaula de tres departamentos para que lo buscaran
«Me llevan unos hombres en un carro, me siento mareado», fue lo último que le dijo José Rodrigo a un pariente suyo el pasado 12 de septiembre cuando puso en alerta a su familia sobre un posible rapto, situación que puso en alerta a las autoridades que organizaron su búsqueda.
Miriam Moreno, una prima suya, contó que José venía de Pisba rumbo a Yopal, donde esa mañana tendría la práctica de unos exámenes, pero que extrañamente despareció.
«Estamos preocupados por él, ya que no tenía amenazas y siempre que viene a Yopal se queda en mi casa», denunció la prima que narró que al parecer fue abordado en el parque La Estancia por desconocidos que lo subieron a un carro. Y ahí se perdió el rastro.
El Gaula y la Fiscalía lo buscaron en Casanare, Boyacá y Bogotá, y muy seguramente cuando ya tenían su ubicación, José Plazas, apareció, el sábado 14 de septiembre a las 3:30 de la tarde ante el Gaula de Puente Aranda en Bogotá, a declarar que estaba ‘vivito y coleando’, y que nunca fue raptado sino que él en medio de su desespero por andar de pelea con su mujer, había salido con ese cuento.
Plazas declaró ante el Gaula que ese jueves había salido de la finca Mata de Limón en la vereda Agua Blanca de Pisba (Boyacá) para Yopal, supuestamente donde el médico, pero que no tenía pensado ir a ninguna cita médica sino que quería ‘tomar un aire ‘ y por eso había seguido para Duitama donde se hospedó en un hotel durante estos tres días, pensando en su situación sentimental.
Plazas dijo que estaba bien de salud física y mental y solicitó que dejen de buscarlo porque ‘ya no me encuentro desaparecido’.
