La información venía en uno de los videos que Merlano Rebolledo le envió a Nicolás Maduro para solicitarle una audiencia luego de su captura en Maracaibo el pasado 27 de enero, precisó El Tiempo.
“Desde hace 2 semanas, miembros del círculo más cercano de Nicolás Maduro tienen en sus manos información según la cual la excongresista colombiana fugitiva Aída Merlano se encuentra embarazada”, dijo el diario.
Esto fue confirmado hace 8 días a ese medio de comunicación por fuentes en la capital venezolana que, según el rotativo, también le revelaron que la exsenadora entregó otros datos, hasta ahora desconocidos en relación con su fuga, al Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebín).
En las declaraciones dadas a ese organismo, continuó el periódico, Merlano mencionó a 2 hermanos que habrían sido claves para su salida hacia Venezuela y que luego, según ella, fueron desaparecidos. Allí también precisó que uno de ellos la mantuvo retenida en una finca en el departamento fronterizo de Cesar antes de cruzar al vecino país, citó el rotativo.
“Si no miente, tendría algo así como 4 meses de embarazo (…). Y habría estado atada de uno de sus pies a una cama, al menos a su llegada a la finca”, señaló la fuente citada por el medio capitalino.
El periódico agregó que esa presunta retención de la exlegisladora ocurrió, de acuerdo con lo dicho por ella misma al Sebín, a mediados de octubre del año pasado, es decir, días después de su fuga en un consultorio odontológico del norte de Bogotá.
Según esa misma fuente citada por el rotativo, Merlano indicó que dichos hermanos supuestamente la ayudaron a moverse hasta la frontera “con la complicidad de 2 poderosas familias políticas colombianas que querían evitar que ella hablara”.
Cabe recordar que el pasado 6 de febrero, durante su audiencia en el Palacio de Justicia de Caracas, la exlegisladora justo señaló que 2 influyentes casas políticas de la costa Caribe colaboraron en su fuga: los Gerlein y los Char.
Además, de acuerdo con lo revelado en su momento por un periodista de la revista Semana presente en la diligencia, Merlano lloró en dicha audiencia mientras contaba que sufrió abusos y “hechos lascivos” en el secuestro del que habría sido víctima por parte de esas familias.
Una vez se dio su escape en Bogotá, complementó otro corresponsal de Blu Radio presente en el recinto judicial, la excongresista fue llevada a una finca a las afueras de Valledupar, capital de Cesar, de donde se escapó el 15 de octubre de 2019.
Entre tanto, en su revelación sobre el presunto embarazo, El Tiempo dice que “es un desafío creer lo que Aida Merlano dice bajo la influencia del régimen y la necesidad de asilo”, algo que también han advertido otros medios y columnistas colombianos.
Fuentes consultadas
