
PAZ DE ARIPORO, CASANARE. El Gobierno departamental continúa avanzando en el mejoramiento de la conectividad vial del campo casanareño. A través de la Secretaría de Infraestructura, ya se han intervenido más de 223 kilómetros de vías rurales en Paz de Ariporo entre 2024 y lo corrido de 2025, como parte del Plan de Recuperación Vial, una estrategia liderada por el gobernador César Ortiz Zorro.
Durante el 2024 se ejecutaron trabajos en 130 kilómetros de corredores secundarios y terciarios en sectores como Montañas del Totumo, Las Guamas, La Hermosa, La Aguada, Tehislandia, El Degredo, La Palmita, La Veremos, Normandía y Cuervas. En 2025, ya se han mejorado más de 93 kilómetros, beneficiando a cientos de familias campesinas que dependen de estas vías para movilizarse, comercializar sus productos y acceder a servicios básicos.
Puentes, alcantarillas y soluciones solidarias
En una reciente mesa de trabajo con el Concejo Municipal de Paz de Ariporo, el secretario de Infraestructura, Álvaro Rivera, presentó el balance detallado de obras. En su intervención destacó los puntos críticos atendidos este año en zonas como Elvecia, Cañadotes, Rincón Hondo, Buenos Aires, La Esperanza y La Mesa, y anunció nuevas intervenciones en el sector El Muese.
También se resaltó la construcción de alcantarillas en concreto mediante acuerdos solidarios con las comunidades, utilizando materiales del Taller de Infraestructura Departamental.
Uno de los avances clave ha sido la entrega de puentes en tubería petrolera, construidos bajo el modelo de autoconstrucción, que han reducido significativamente los costos. En 2024 se entregaron los puentes San David y La Frontera, con inversiones cercanas a los $150 millones cada uno. Para este año, se avanza en los puentes de La Candelaria y La Palmita ($300 millones), y se proyecta la construcción de un puente de 42 metros sobre el río Guachiría, entre Manirotes y Santa Marta.
Compromiso con el campo
La estrategia del Plan de Recuperación Vial ha superado ya los 2.500 kilómetros intervenidos en todo el departamento durante el actual gobierno, consolidando un modelo de infraestructura eficiente, participativo y territorial.