Un fiscal delegado ante el Tribunal Superior de Bogotá confirmó, en segunda instancia, la resolución de acusación contra Antenor Sarmiento Delgado y Ramiro Pinzón Suárez, exgerentes de la petrolera Perenco. Ambos fueron imputados por el delito de concierto para delinquir agravado, una figura que había sido calificada como de lesa humanidad.
La investigación, dirigida por el fiscal del Grupo de Compulsas de la Dirección de Justicia Transicional, estableció que Sarmiento Delgado y Pinzón Suárez habían actuado como intermediarios en acuerdos con el frente Héroes de San Fernando del Bloque Centauros y las Autodefensas Campesinas del Casanare entre 1996 y 2005.
Según las acusaciones, los exdirectivos proporcionaron dinero, combustible, transporte y alimentos a estos grupos armados ilegales. A cambio, recibieron servicios de seguridad para proteger los pozos petroleros de Perenco. El proceso se desarrolló bajo la Ley 600 de 2000, el antiguo sistema procesal penal.