Rigoberto Urán prendió las alarmas frente al presente y futuro del ciclismo colombiano.
En un deporte en el que el país se acostumbró a ganar o ser protagonista en las pruebas más importantes del pedalismo mundial en los últimos años, la falta de títulos o podios empieza a preocupar y a generar debate.
Luego del reciente Tour de Francia, en el que Colombia solo tuvo la presencia de Daniel Felipe Martínez, Urán y Nairo Quintana, siendo este último el mejor clasificado en la sexta posición, Rigoberto, con la sinceridad que lo caracteriza, advirtió que el nivel de los nuestros ha bajado.
“Estábamos arriba. Antes teníamos siempre gente en el podio con Chaves, Miguel Ángel, conmigo… Había muchos podios. También con Gaviria, que peleaba en los sprints. Pero estos dos últimos años no están siendo buenos”, indicó Urán en charla con el diario Marca y de cara a su participación en la Vuelta a España que se iniciará el 19 de agosto en Utrecht, Países Bajos.
Pero Rigo, subcampeón del Giro de Italia 2013 y 2014, y del Tour galo-2017, profundizó sobre el asunto cuando le preguntaron si tenía fe sobre el futuro del ciclismo nacional.
El reconocido y experimentado escarabajo de 35 años de edad señaló que hay hombres con jerarquía y talento como Sergio Higuita, Daniel Felipe Martínez y Santiago Buitrago; no obstante, enfatizó que “buenos, buenos, por detrás de ellos, no hay”.
“Creo que tenemos un problema y es que el método que teníamos ya no funciona. En la actualidad se requiere que el ciclista sea muy hábil. Tienes que saber manejar muy bien la bici. Ser un ciclista más agresivo”.
Subrayó que en una carrera, desde el kilómetro uno, ya se está atacando. “No vale simplemente con ir bien en la montaña y defenderte en el resto, tienes que ser un ciclista completísimo”.
Entre ellos mencionó a Tadej Pogacar, Wout Van Aert, Remco Evenepoel, Mathieu van der Poel y Jonas Vingegaard, último vencedor del Tour.
Frente a lo que dice Urán y ante los cambios que se presentan en el ciclismo, que viene siendo dominado en la actualidad por jóvenes, ¿Colombia estará huérfano de grandes resultados en los venideros años?, ¿qué se debe hacer para continuar siendo potencia en este deporte y más corredores nuestros vuelvan a ser fichados en las principales escuadras del mundo y así tengan más oportunidades de figurar?
¿Sin tecnología?
“La ciencia ha avanzado, y en ese sentido todos nos tenemos que actualizar y sincronizar con los sistemas de entrenamientos. Estos son muy tecnificados, metidos en lo máximo del límite, por eso salen en Europa tantos corredores jóvenes y buenos”, indicó el entrenador colombiano Absalón Rincón.
“Ese es el problema que tenemos en Colombia, que no hay las herramientas para trabajar. Puede que existan los entrenadores con el conocimiento, pero no se posee la tecnología para hacer las pruebas suficientes a los corredores y saber hasta dónde pueden llegar. Si acá no se tecnifica el ciclismo con lo que tiene que ver con los planes de entrenamiento, más allá del talento que existe, difícilmente aparecerán ciclistas como Egan, Martínez o Higuita”, agregó el orientador.
El problema es mundial
Para Fabio Rodríguez, formador de Egan Bernal, corredores como este último no nacen todos los días, y descubrir estrellas como él no solo es una dura misión en el país sino también en el ámbito mundial. “Si uno mira España o Francia, están jodidas, no tienen representantes en el top-3 como en anteriores épocas”.
Rodríguez asegura que hay entrenadores brillantes, pero hallar una figura no es tan fácil.
“Sí salen deportistas buenos, pero de la calidad de Egan, Nairo o Rigo, muy pocos”… Y es normal, pues imagínese que salgan diez corredores como Egan al mismo tiempo, eso es imposible. Hay unos países que están en cosecha, otros que no. Toca seguir trabajando en las diferentes modalidades y desde temprana edad para que surjan más y completos para los distintos terrenos”.
Añadió que hoy brillan los ciclistas de Eslovenia, Dinamarca y Países Bajos, inspirados en los grandes logros, pero que más adelante saldrán nuevas figuras en nuestro país. Sin embargo, las palabras de Rigo invitan a la reflexión.
Fuente: El Colombiano
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