
El abogado Rigoberto Alfonso Pérez, mandatario de los sogamoseños, cuenta qué se acordó en la reunión que se llevó a cabo en el municipio de Pajarito con el director de Ejecución y Operación del Invías, Juan Esteban Romero Toro, sobre la reapertura de la carretera entre Sogamoso y Aguazul, que ha estado fuera de servicio desde el pasado 30 de octubre debido a la pérdida de la banca en el sector La Granja. También explica cuáles fueron las solicitudes de él como alcalde y del Gobernador de Boyacá, Ramiro Barragán Adame, al Gobierno nacional.
¿Cuál fue el compromiso que adquirió en Pajarito el director de Ejecución y Operación del Invías, Juan Esteban Romero Toro, acerca de la reapertura de la transversal del Cusiana?
El ingeniero Juan Esteban Romero Toro nos dijo que tenían hasta dos meses para reabrir la vía del Cusiana por la intervención que deben llevar a cabo, por el tipo de intervención que se debe hacer a fin de estabilizar la parte alta de la montaña, para luego sí empezar con la recuperación de la carretera.
¿Es decir que por este año la carretera Sogamoso – Aguazul no se pondría en servicio?
Todo parece indicar que la reapertura de esta vía tan importante para Casanare y Boyacá se daría hacia mediados del mes de enero del 2022.
¿Qué les comentó Romero Toro sobre el tipo de obras que están ejecutando en el sector La Granja, donde ocurrió el deslizamiento que se llevó la vía?
La intervención que están realizando en el sector es de terraceo, es decir construir terrazas, espacios en forma de escalones en la ladera para evitar que la montaña se siga deslizando. Después de eso harían la vía pegada al cerro. Esto sería una solución provisional, porque la solución definitiva es un viaducto.
¿Y acerca de las vías alternas para comunicar a Boyacá con Casanare qué se habló en esa reunión del municipio de Pajarito?
Yo le expliqué al ingeniero Juan Esteban Romero Toro que por más rutas alternas que existan entre Boyacá y Casanare, la principal siempre será Aguazul – Sogamoso, porque es la ruta de la comida, del pollo, de la fruta, de la verdura que está en Sugamuxi. Cuando se trata de comida no se puede enviar un vehículo por Socha-Sácama-La Cabuya, porque va a salir 200 kilómetros más allá de Yopal, en Hato Corozal.
Por la transversal del Sisga es un recorrido muy largo, que encarece el viaje y que luego eso se ve reflejado en el costo de los alimentos. Para ir por Villavicencio hay que atravesar Bogotá y el recorrido también sale más costoso por la distancia y los peajes que hay que pagar. Por la vía Labranzagrande-El Morro-Yopal solo pueden transitar vehículos medianos y sus condiciones no son las mejores y en cualquier momento se puede cerrar, entonces esto nos demuestra que la vía más expedita para comunicar al centro del país con Aguazul y Yopal es por la carretera del Cusiana.
¿Se va a habilitar alguna carretera terciaria para que los habitantes de Pajarito se puedan comunicar con Boyacá mientras se reabre la vía del Cusiana?
Se están trabajando dos alternativas, una de las cuales es por Pajarito – Recetor – Curisí, con maquinaria de la Gobernación de Boyacá, gracias a la iniciativa de nuestro gobernador Ramiro Barragán Adame, quien ha delegado esa obra en la Secretaría de Infraestructura del departamento. La otra vía es de cinco kilómetros y el gobernador de Boyacá se comprometió a ayudar con su apertura siempre y cuando Corporinoquia dé las autorizaciones ambientales y el alcalde de Pajarito consiga los permisos de los propietarios de los predios que atravesará la carretera.
¿Cuál fue la propuesta que Usted le hizo al Invías?
Fue la misma que hice en el Congreso de la República hace un par de meses: que se construya una doble calzada entre Sogamoso y Aguazul. Lo mejor que nos puede pasar a nosotros, además del mantenimiento de la vía del Cusiana, es que tengamos la visión de hablar de la doble calzada Sogamoso – Aguazul, porque de esa forma se une la economía más fuerte de Colombia, que es la de Bogotá, en doble calzada con nuestro hermano departamento del Casanare.
¿Pero si es viable una doble calzada dadas las condiciones de la inestabilidad geológica que hay en la zona por donde transcurre la vía?
Si se quiere solucionar en forma definitiva lo que hoy pasa, pues hagamos la doble calzada como una intervención definitiva, porque no son 120 kilómetros de fallas geológicas, sino en realidad son 120 kilómetros que nos unen, con 18 puntos inestables en donde se pueden hacer terraceos y puentes, así como el viaducto de 800 metros que actualmente se encuentra en esta vía.
¿Y cuál es su solicitud puntual para el Gobierno nacional?
Que el Gobierno nacional se comprometa para que se apropien los recursos de los estudios y diseños de la doble calzada Sogamoso- Aguazul. Quiero aprovechar este espacio para agradecer el trabajo mancomunado de los gobernadores Ramiro Barragán, de Boyacá, y Salomón Sanabria, de Casanare, quienes también están impulsando esta solicitud de la doble calzada, que permitirá fortalecer las economías de los dos departamentos.
¿Cómo está el tema de los vuelos desde Sogamoso a Yopal? Con toda la disposición, pero la cultura que existe es la de viajar en bus. No ha habido mucha demanda de vuelos y son pocos los que han salido para cubrir esta ruta desde que se cerró la vía del Cusiana hace un mes.
Fuente, Boyacá 7 Días