Ya son dos días. La comunidad está aislada desde el martes pasado cuando las lluvias sacudieron el pueblo y los dejó sin luz y sin cómo comunicarse con los pueblos vecinos.
Una de las vías afectadas es la de Los Libertadores, que tiene por lo menos 10 kilómetros en un estado deplorable, donde ni siquiera pueden transitar las mulas. Ni qué decir en el Arenal, donde el río se llevó la bancada y los derrumbes taponaron la vía.
Por esta razón la comundidad está pidiendo que la Secretaría de Obras del departamento les envíe maquinaria para que habiliten el paso.
Las lluvias no solo han dejado incomunciado al pueblo sino que lo tienen a oscuras, porque al parecer las descargas atmosféricas averiaron el sistema eléctrico. La población culpa la falta de mantenimiento.
Y las comunicaciones telefónicas están nulas. El viejo puesto de Telecom quedó abandonado y Claro, que e s el único operador de telefonía móvil, está silenciado, porque tampoco tiene señal óptima y los pobladores logran comunicarse con la civilización cuando están de buenas: se despeja el clima y se mejora la señal.