Este martes 24 de julio diversas instituciones del Estado y la Organización de las Naciones Unidas hicieron un balance del proceso de exhumación, identificación y entrega de los restos de las víctimas de la masacre de Bojayá, departamento del Chocó, que ocurrió el 2 de mayo de 2002.
Este balance se hace después de que la Fiscalía General de la Nación y Medicina Legal informaran los pasados días que habían terminado los exámenes médicos, odontológicos y radiográficos, y que estaban concluyendo los genéticos que permitieron avanzar en el proceso de identificación de las víctimas.
Gracias a este proyecto se han logrado documentar 83 casos, en los que se han logrado recuperar 76 cuerpos, según la Presidencia de la República, resaltando que se hizo por medio del trabajo articulado y coordinado entre entidades como la Consejería Presidencial para los Derechos Humanos, la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas, el Centro Nacional de Memoria Histórica, la Fiscalía General de la Nación y el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses.
A través de este proceso que es financiado por el Fondo Multidonante de las Naciones Unidas para el Posconflicto, PNUD y ONU Derechos Humanos, se ha buscado garantizar la participación de las víctimas y el acompañamiento técnico forense para lograr la comprensión de las tareas de búsqueda, exhumación, identificación y entrega digna de restos de las víctimas de la masacre.
Paula Gaviria, actual consejera presidencial para los Derechos Humanos en Colombia, este proceso de articulación de las víctimas de Bojayá debe continuar y prolongarse hasta que los derechos de la comunidad sean materializados sin tener interrupciones.
“Nuestra experiencia conjunta entre la sociedad civil y la institucionalidad nos dice que ha sido un buen camino de apuestas comunes y que debe ser un referente para trabajar por la población víctima de otras comunidades que esperan la atención coordinada del Estado”, aseguró la consejera presidencial.
Además, desde la Consejería se resaltó que este proyecto ha garantizado que 250 personas, 170 mujeres y 80 hombres, familiares de las víctimas mortales participaran de manera informada, en todas las etapas del proceso de exhumación e identificación.
“El proyecto de Bojayá, financiado por este Fondo, pretende ayudar a cerrar un ciclo de dolor que lleva 16 años, a través de la garantía de la verdad, la participación informada de los familiares y la entrega digna de las víctimas mortales de Bojayá”, aseguró Martín Santiago Herrero, coordinador residente de la ONU, copresidente del Fondo Multidonante y representante residente del PNUD.
Las acciones de este programa se lograron materializar gracias a las actividades propuestas en los espacios de intercambio entre el Comité de Derechos por las Víctimas de Bojayá, los familiares de las víctimas y las instituciones involucradas.
